Se trata de un estado que posee una exuberante naturaleza. Por ello, tal vez, la cultura maya eligió este punto de nuestro país para establecerse y construir impresionantes templos, los cuales, hasta el día de hoy, causan gran admiración entre el turismo nacional e internacional.
La palabra Chiapas es de origen náhuatl y está formada por dos vocablos: chía que es el nombre de una semilla utilizada en la preparación de una bebida refrescante de la región y apan, que significa “en el río de la chía”.
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Chiapas es un gran referente del turismo mexicano, ya que es un estado situado al sureste de la República Mexicana. Posee un clima muy cambiante, que va desde lo cálido, húmedo, hasta el frío, este último se registra en la cima del volcán Tacaná.
Chincultik
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Motivos de su construcción
El sitio se alzó por su culto al agua y la veneración al sol.
Entre las zonas mayas de Chiapas, esta es la menos conocida, pero no por ello la menos impactante. Su nombre guarda gran significado, ya que quiere decir “pozo escalonado”, que hace alusión a su ubicación. lo más impresionante de esta zona son sus abundantes inscripciones jeroglíficas.
Palenque
Secretos Mayas
Es uno de los sitios arqueológicos más importantes.
Fue el mejor lugar que eligieron los Mayas para honrar a sus dioses. Esta zona posee el encanto de estar sumergida entre vegetación, una selva que aún ahora oculta y atesora riquezas arquitectónicas que datan del siglo VII. te recomendamos visitar su museo.
Yaxchilán
Arquitectura espectacular
El sitio es conocido por sus dinteles de piedra.
Esta zona está rodeada por abundante vegetación, pues está ubicada en la Selva Lacandona y cerca del Río Usumacinta. Entre las ruinas que permanecen se pueden encontrar representaciones de los rituales religiosos de los mayas, así como aspectos políticos de esta gran cultura.
Toniná
Sorpresas a cada paso
Su estructura piramidal es la más grande de México.
Un lugar mágico donde el viajero se puede reconectar con el pasado y para los mayas, un sitio sagrado, ubicado en el municipio de Ocosingo. De acuerdo con arqueólogos, esta zona fue establecida por un pueblo guerrero y el florecimiento de su territorio fue entre el 600 y 900 d.C.