Ernesto Che Guevara es un ícono mundial, su historia comienza en su tierra natal, Argentina donde pasó sus años de juventud y donde vivió grandes aventuras al lado de su amigo, Alberto Granado y fue este viaje, el que lo acercó a otros mundos y lo hizo transformarse en el guerrillero y médico incorruptible que fue hasta el final de sus días. Son estos viajes, a bordo de su motocicleta los que quedaron inmortalizados en la película "Diarios de Motocicleta".
Fue en 1952 cuando el Che y su amigo emprendieron el viaje a bordo de una vieja motocicleta, una Norton 500ES2 de 1939 a la que bautizaron como "La Poderosa II", en ella se lanzaron a la aventura para explorar varias regiones de América Latina durante cuatro meses. Esta es una de las dos travesías que realizó Ernesto Guevara movido por su espíritu aventurero para descubrir el continente, en el que atravesó montañas, ríos, lagunas, pueblos y selvas.
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Qué visitar en la Ruta del Che
Esta travesía histórica es una aventura que todo amante de este personaje debe realizar, al menos una vez en la vida, para comprender los motivos que lo llevaron a transformarse en guerrillero. El viaje se puede hacer por aire, llegando a los lugares que conoció y luego rentar un auto en cada lugar para adentrarse por estos paisajes. La sugerencia es viajar ligero, también puedes vivir esta experiencia en un viaje de mochilero. y tomarte el tiempo necesario para descubrir cada pueblo.
La ruta comienza en Córdoba donde debes descubrir el centro donde se encuentra el pasaje Santa Catarina, la catedral, famosa por las pinturas de la bóveda, y la plaza San Martín. Ahí puedes rentar un auto para visitar Alta Gracia, donde está la localidad de Villa Nydia, la tierra que vio nacer al Che. En ese sitio está la casa donde vivió durante los primeros once años de su vida, hoy es uno de los museos más visitados del mundo donde verás fotografías, muebles, libros y hasta una réplica de su moto y de su bicicleta.
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El siguiente punto de la ruta es la Patagonia Argentina, custodiada por la Cordillera de los Andes y el océano Atlántico, ahí hay que visitar la provincia de Neuquén, y luego ir a la localidad de Villa Traful, que por sus encantos es considerado uno de los sitios más bellos del continente, este lugar hechizó a los amigos y desde aquí partieron hacia Chile, durante el trayecto visitaron las poblaciones de Temuco, Lautaro, Los Ángeles, en la región de la Araucaria, donde está Ñielol.
En ese sitio es imperdible una visita al mercado para comprar artesanías mapuche y probar las delicias locales que se preparan en la región. Aquí hay que pasar al centro para visitar sus templos y edificios históricos. No puedes irte sin visitar sus lagos y el área natural protegida, es una travesía en plena naturaleza y que se puede descubrir en moto, en bicicleta o a pie. Luego hay que partir hacia la región costera, por la que los amigos cruzaron para llegar al Desierto de Atacama, en Chile.
Travesía del Che por América Latina
También cruzaron la amazonia peruana donde conocieron la Plaza de Armas, la Gobernación, declarada Monumento Nacional, el Museo Histórico, el monasterio del Espíritu Santo, las fábricas de cerámica artesanal, la mina de cobre Chuquicamata y luego cruzaron los Andes para llegar a Venezuela para cuando Alberto cumpliera 30 años, el 9 de abril. Para poder solventar sus gastos de viaje, el Che ofreció sus servicios como médico.
Más adelante sufrieron un accidente con "La Poderosa II" y tuvieron que seguir a pie por Valparaíso y llegaron a Perú donde fueron a Machu Picchu e Iquitos y luego, a bordo de una embarcación llamada "La Cenepa" comenzaron su viaje por el Amazonas peruano. Luego, en compañía de una chica (según el diario del Che) que los acompañó en el viaje. Para poder llegar a su destino construyeron una balsa a la que bautizaron como "Mambo Tango" y en la que llegaron a Colombia.
Y más tarde se dirigen a Bogotá donde juegan futbol y trabajan como entrenadores para un equipo local. El recorrido termina en esta ciudad colombiana debido al asma que aquejaba al Che, y, finalmente regresan, en avión a Buenos Aires, el 31 de julio de 1952. Aunque es una travesía larga y llena de aventuras puedes organizar tu itinerario para conocer los puntos más emblemáticos de esta ruta histórica.