En la parte norte de la península de Yucatán, en donde la reserva de Yum Balam se encuentra con el mar Caribe y el mundo natural se confunde con el espiritual, la isla de Holbox es la vía de entrada a un paraíso que ha anclado su belleza a los rasgos del ecosistema y el tiempo, a sus ritmos.
Como un puente que se extiende entre el entorno, el cuerpo y la mente, Ser Casasandra, un pequeño albergue de 17 habitaciones fundado por la artista cubana, Sandra Pérez Lozano, presenta Ser Retreat, una serie de programas que invitan a sus huéspedes a reconectar con sigo mismos y con el paisaje natural.
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Sky Mind: Transcend The Mind, Open The Heart, el primero de los retiros proyectados por Shirayam y Habiramy, co fundadoras de la plataforma latinoamericana, Dharma Global, que desde hace 25 años ha diseñado retiros de autoconocimiento en 10 países, comprende prácticas como meditación, inmersión en la playa, ceremonias mayas de purificación, y ejercicios de proyección y percepción para fomentar el balance y el bienestar de sus huéspedes.
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Inmersión total
Entre la jungla y el mar, de los manglares a las leyendas de piratas, y con jornadas que se dividen entre las aventuras en la naturaleza y las largas horas de relajación, una agenda “saludable” en Holbox también depende de su balance.
Con días que comienzan con sesiones de yoga al amanecer o en una excursión para nadar con los majestuosos tiburones ballena, y terminan con un tratamiento en el spa o nadando en la oscuridad apenas rota por los destellos de plancton bioluminiscente, en la isla todos los caminos parecen llevar en la misma dirección: de regreso a la naturaleza.