Nuestro país resguarda varios atractivos naturales que pueden servir de escenario para las mejores películas, con paisajes encantadores que maravillan los sentidos de cada viajero que se atreve a aventurarse entre los senderos más recónditos de este territorio, para encontrar aventuras indescriptibles, que sólo pueden vivirse al adentrarse en las diferentes poblaciones y comunidades de los diferentes estados de esta república, en donde las delicias gastronómicas, leyendas, tradiciones y actividades recreativas, se pueden disfrutar sin importar la edad o los gustos de cada visitante, porque hay mucho que ofrecer para cada tipo de viajero y su presupuesto.
En el estado de Puebla podemos encontrar muchas comunidades encantadoras, rodeadas por las elementos que la naturaleza nos ha regalado, para que nuestros sentidos se maravillen y en esta nota vamos a viajar hasta el maar poblano, un en uno de los municipios más sorprendentes, que puedes visitar en un viaje corto de fin se semana, para adentrarte en las aguas azules de este espacio natural, donde los paisajes montañosos se encargarán de acompañar tus fotografías, para darte las mejores tomas que puedes compartir en tus redes sociales, un excelente plan para no quedarse en casa.
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¿Dónde está el maar de Puebla?
Entre las poblaciones de El Seco y Ciudad Serdán, a una hora con 45 minutos desde la ciudad de Puebla, capital del estado y a sólo tres horas de camino por carretera desde el centro de la Ciudad de México, se encuentra Aljojuca, un pueblito encantador cuyo nombre proviene del náhuatl y significa “en el azul celeste”. En la época prehispánica, las tribus nahuas se asentaron en esta zona y hasta la actualidad, permanecen en este espacio. En la zona de un cráter de agua, que la gente ha nombrado como axalapascos, se forma un hermoso espectáculo natural en el que sus aguas azules, cambian a color verde, debido a la combinación de sus minerales y el azufre.
¿Por qué se le llama maar de Puebla?
Aunque no se trata de un lugar en la costa, ni de un error de escritura, el nombre de maar se debe a que es un cráter volcánico ancho y bajo, que se forma por una erupción freático-magmática, lo que se traduce como una explosión causada por el contacto del agua subterránea y la elevada temperatura de lava o magma que corren por debajo de estos elementos. El término maar, proviene de Eifel, que es una región volcánica ubicada en la parte oeste de Alemania y hace referencia a los lagos que ocupan cráteres en la zona donde se ubicaban antiguos volcanes, maravillas de la naturaleza donde podemos vivir un fin de semana espectacular, rodeado de grandes elementos majestuosos.
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El pueblo de Aljojuca está ubicado en la parte alta, muy cercano a la laguna, un lugar que cuenta con una de las vistas más privilegiadas hacia este maar, porque además de las aguas celestes de esta laguna, a lo lejos se forma un paisaje acompañado por el Citláltépetl, en el Parque Nacional Pico de Orizaba, que hace un contraste perfecto con los colores vivos de este cuerpo de agua, una travesía que puedes finalizar al recorrer los lugares más representativos dentro del pueblo, como la Iglesia de la Parroquia, una construcción del siglo XVI, así como la Iglesia del Calvario, que finalizó su construcción a inicios del siglo XIX, que cuenta con varias pinturas al óleo del año 1907.
Otor de los atractivos que debes conocer en tu visita a Aljojuca es la Ex Hacienda de Caxcantla, un hermoso edificio barroco de 400 años, que fue construida en 1702 por los monjes franciscanos. Este espacio es muy famoso entre los pobladores, debido a las diferentes historias que se escuchan entre los habitantes, sobre el tesoro escondido de la nación, que el ex presidente Carranza enterró en este espacio al salir de la Ciudad de México, un punto imperdible que debes conocer en tus paseos por el estado de Puebla, si eres amante de los lugares al aire libre, los paisajes más sorprendentes y los elementos coloniales que envuelven a las comunidades mexicanas.