El pasado prehispánico se extiende a flor de piel en todo el país, con su monumental arquitectura y sus museos de sitio que resguardan la riqueza y esplendor de sus antiguos habitantes y que eriza la piel al contemplarlas. Mayas, otomíes, aztecas, olmecas, chichimecas, tlaxcaltecas y un menú extenso de culturas que se asentaron en este territorio y que hoy forman parte del sincretismo cultural, religioso y gastronómico y de la riqueza del México moderno.
En el corazón de Morelos existen varias ciudades antiguas en las que se pueden admirar juegos de pelota, pirámides majestuosas, murales, relieves y vestigios que dejaron sus habitantes y que nos muestran cómo vivían, los dioses que adoraban y hasta los rituales y ceremonias que realizaban. Si te gusta la arqueología estas son 3 zonas arqueológicas en Morelos para conocer en un viaje de ida y vuelta.
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Xochicalco
Es la cuarta zona arqueológica más visitada de México. Aquí podrás contemplar una serie de monumentos importantes como la Plaza de la Estela, la Acrópolis donde los gobernantes se reunían. Lo más impresionante de este lugar son los relieves tallados piedra y su observatorio conocido como La Cueva, una caverna por la que se filtran los rayos del sol durante el equinoccio de primavera y verano. Aunque durante el solsticio de invierno también es posible admirar un espectáculo natural que ilumina toda la cueva con el paso del sol. En la salida de esta antigua ciudad encontrarás vendedores de artesanías y de dulces típicos de la región.
Coatetelco
Por la carretera a Cuernavaca con dirección a Alpuyeca encontrarás la desviación a Coatetelco, una ciudad prehispánica cuyo nombre significa "montículos de serpientes". En este sitio se veneraba a diversas deidades como la diosa de los laguneros, quien tenía poder sobre ríos, lagos, lagunas y mares. En este lugar se puede conocer el templo dedicado a Ehécatl, dios del viento. También cuenta con un museo de sitio y está rodeada por una laguna, protagonista de una leyenda que cuenta sobre una piedra en forma de serpiente que la custodia y que señala que quien se atreva a sacarla morirá ahogada y provocará la sequía de la región.
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Chalcatzingo
Rodeada de ceibas, jacarandas y cactáceas está Chalcatzingo, la zona arqueológica en la que se establecieron los olmecas alrededor del año 1500 a.C. Además de pirámides encontrarás esculturas talladas en piedra y bajorrelieves tallados en los muros, algunos de ellos son: "La creación del hombre", "el dador del agua", "el linaje de los gobernantes" y "la fertilidad", entre otros. En Chalcatzingo también hay un museo de sitio en el que puedes conocer diferentes figuras y piezas. La zona arqueológica está en la comunidad del mismo nombre, puedes llegar desde Cuernavaca, por la carretera 115 D México-Cuautla.