Hidalgo es una entidad cercana a la Ciudad de México donde podrás disfrutar una ESCAPADA espectacular al adentrarte entre sus bellos y ocultos espacios donde la naturaleza es lo que más sobresale en cada uno de ellos, sitios enigmáticos en los que fluyen increíbles manantiales termales, hermosas cascadas y varios otros espacios que te deslumbrarán en cada travesía.
Si estás buscando un lugar perfecto para tomarte increíbles fotos entre sus escenarios naturales donde todo reverdece, prepárate para visitar Agua Blanca, un lugar rodeado de vegetación donde el aire fresco se respira en cada paso y tienes la posibilidad de contemplar hermosas cascadas que te refrescarán en estos días calurosos que marcan el inicio de la temporada primaveral.
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¿Dónde se encuentra Agua Blanca?
Ven a conocer este paraíso terrenal que se localiza a solo 153 kilómetros desde el Centro Histórico de la Ciudad de México, un lugar al que podrás llegar tras viajar por un aproximado de tres horas en tu automóvil, así que ven preparado para la aventura, recorrer senderos encantadores y probar deliciosa comida local entre estos sitios que llaman la atención de cualquier viajero que desee estar en contacto con la naturaleza.
Para poder sumergirte en sus espesos bosques es necesario llegar primero al ejido de San Pedrito y desde aquí, comenzar el recorrido a pie. En este lugar encontrarás una impresionante cascada con una caída de 50 metros de alto con aguas que llegan directamente a una poza natural que se forma en la parte baja, un sitio donde los apasionados del campismo podrán armar sus tiendas para vivir una noche a la intemperie.
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¿Qué actividades hay en Agua Blanca?
Después de caminar por un periodo de tres horas desde la cascada Los Jilgueros se llega a otra imponente cascada llamada Las Golondrinas, con una caída espectacular de 150 metros de altura. Para llegar aquí puedes tomar el sendero a pie o rentar una bicicleta de montaña que te ayudará a poner a prueba tus habilidades y conocer de cerca estos paisajes que resplandecen con el agua que brota hacia estos espacios.
Puedes aprovechar tu estancia para recorrer sus caminos en práctica de senderismo, trasnochar al hacer un campamento con toda tu familia donde aprovecharán las áreas verdes para tener un descanso placentero, hacer una fogata y charlar a la luz de la luna, recorrer sus caminos en bicicleta o simplemente disfrutar las vistas de este lugar rodeado por los sonidos de las aves y animales que aquí se refugian, un sitio más que perfecto para armar tu próxima ruta el fin de semana o en vacaciones.