Además de los increíbles espacios que hay en México como sus bosques, playas, lagunas, cascadas y selvas, también encontrarás bellos desiertos con una flora y fauna especial. Uno de los destinos más destacados es la Zona del Silencio, considerado entre los más misteriosos del mundo a tal grado de ser comparado con el Triángulo de las Bermudas. Dicha zona se encuentra entre Chihuahua, Durango y Coahuila, pero las cosas que ocurren dentro de ella no tienen explicación.
Se trata de un sitio que se encuentra siendo estudiado y visitado por científicos, como también gente curiosa de todo el mundo, pues aquí los relojes y brújulas fallan, incluso los celulares dejan de funcionar. Siempre se señala como un sitio donde ocurren sucesos extraños como el avistamiento de ovnis, hallazgos de meteoritos antiguos (incluso más que el sistema solar), entre otras anomalías.
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¿Dónde se encuentra la Zona del Silencio en México?
Comparado con el triángulo de las bermudas, la Zona del Silencio se encuentra exactamente en el Bolsón de Mapimí, a sólo 180 kilómetros de Torreón, Gómez Palacio y Lerdo, entre los estados de Chihuahua, Durango y Coahuila al norte de México. En cuestiones históricas, este territorio estuvo sumergido por las aguas del Mar Thetis, así que se encuentra con una amplia variedad de restos fósiles marinos, así como una alta concentración de aerolitos.
Se llama Zona del Silencio porque el Ingeniero Augusto Harry de la Peña, ex trabajador de Pemex, se dedicó a investigar la zona donde se detectó irregularidades con la recepción radiofónica en 1964 la cual había sido enviada para averiguar si la zona era ideal para un oleoducto de Jiménez a Chihuahua, pero el resultado fue la detección de las anomalías. Así que el proyecto no se llevó a cabo así que decidió buscar respuestas de sus anomalías.
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Las zonas muertas de la señal de radio provocaron que se le acuñara este nombre al esta área. En la Zona del Silencio se encuentran increíbles animales, desde las tortugas del desierto que están en peligro de extinción, nopales violáceos, ratas canguro, liebres, insectos, etc. Gracias a sus características naturales se declaró como Reserva de la Biosfera de Mapimí, una zona protegida por la UNESCO.