En México existen muchos rincones por conocer en tus días libres y para hacer un viaje en el tiempo no hace falta una máquina especial, pues al recorrer algunos de los estados que conforman esta república se pueden conocer impresionantes sitios arqueológicos que nos cuentan sobre el pasado de las civilizaciones que habitaron este enorme territorio desde tiempos ancestrales.
Para maravillarte con las creaciones de nuestros antepasados no será necesario recorrer largas distancias pues cerca de la CDMX encontrarás la zona arqueológica más alta de México que puedes visitar a menos de dos horas de viaje desde el Centro Histórico, un lugar perfecto para amantes del senderismo que quieran disfrutar una de las vistas más espectaculares y recargar sus energías al subir a esta montaña.
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¿Cuál es la zona arqueológica más alta de México y en dónde se encuentra?
En el Estado de México, a solo 68 kilómetros de distancia desde la capital metropolitana se localiza un volcán inactivo en el que yacen los vestigios de un antiguo templo, una zona arqueológica que se localiza entre los municipios de Texcoco e Ixtapaluca en aquella entidad, el cual puedes conocer al viajar por una hora con 30 minutos desde la CDMX en tu automóvil particular.
La cima de Monte Tláloc se localiza a 4,120 metros sobre el nivel del mar y este lugar, considerado como la novena montaña más alta del país, junto con el Telapón y otros cerros conforman la llamada Sierra de Río Frío, una parte de la famosa Sierra Nevada en el país y este volcán en particular también forma parte del Parque Nacional Izta-Popo, una de las primeras reservas naturales que hay en México.
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Este lugar se consideraba como uno de los puntos sagrados más importantes de nuestro país para los pueblos de la Triple Alianza gracias a su cercanía con el Lago de Texcoco, así como por los diferentes manantiales y ríos que provenían del deshielo, por lo que se vinculó a este monte con la deidad Tláloc, el dios de la lluvia y para honrarlo, los nahuas construyeron una calzada de 150 metros que llega hasta un templo localizado en la cima de este cerro, vestigios que datan del 300 a 150 después de Cristo.
A pesar de lo que muchos creen, Monte Tláloc cuenta con uno de los templos prehispánicos más altos en el mundo ya que su altura, sumada a la del centro de México lo convierten en el yacimiento arqueológico de mayor altura en Mesoamérica y entre sus rasgos más distintivos podemos conocer un hermoso fenómeno natural cercano al día 12 de febrero cuando es posible observar que durante el amanece, entre este, Pico de Orizaba y la Malinche aparece una montaña fantasma en días que coinciden con el calendario mexica.
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) indica que este lugar además de ser un sitio sagrado de peregrinaje, fue una montaña utilizada como tetzacualco u observatorio astronómico, pues se sabe que aquí se realizaban algunos rituales relacionados a la obtención de buenas cosechas y para mantener un equilibrio con la naturaleza de los alrededores y en este lugar se encontraron algunos petrograbados con imágenes de anfibios, serpientes, tortugas y más animales vinculados con el culto al agua.