La temporada decembrina en México trae consigo la seguidilla de fiestas conocida como el maratón Guadalupe Reyes, que comienza con los tradicionales festejos a la Virgen de Guadalupe el 12 de diciembre, siguiendo con las emblemáticas nueve posadas que concluyen con nochebuena y dan paso a los festejos de Navidad, para, siete días después dar la bienvenida al año nuevo, y extenderse hasta Día de Reyes.
Por si esto fuera poco, el invierno en nuestro país nos regala escenarios que se tiñen con una blanca belleza durante esta época, gracias a las bajas temperaturas y a las nevadas que se registran en diversas zonas de México, regalándonos bosques nevados como los colindantes en la zona de La Marquesa, sin olvidar novelas altas montañas teñidas de blanco de Mazamitla, Jalisco, o Arteaga, Coahuila, sitios conocidos también como las suizas mexicanas.
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Sin embargo, existe un emblemático destino que se ha mantenido como una joya poco conocida donde podremos disfrutar, como su nombre lo indica, de una cascada congelada, que es un imponente e inolvidable escenario natural enclavado en las altas montañas del centro del país, por lo que además de todo, es muy accesible en un viaje corto desde la capital del país, ideal para disfrutar en lo que resta de la temporada invernal en México.
Cascada congelada en México
Esta increíble belleza natural se ubica en un viaje muy corto desde la capital del país en el Estado de México, específicamente en el municipio de Tlalmanalco, en un viaje de aproximadamente 2 horas desde la capital del país, dentro del Parque Dos Aguas, en un escenario imperdible para la temporada invernal, donde podrás descubrir la belleza única de esta caída de agua completamente congelada, donde puedes practicar rapel, tirolesa y deportes en el río.
Esta imperdible cascada se encuentra a 4,000 metros de altura, en un escenario inolvidable que regala la temporada invernal, que permanece inerte gracias a la nieve que la cubre, regalando un espectáculo lleno de belleza natural que se extiende a lo largo de 40,000 hectáreas, donde también podremos encontrar manantiales casi a punto de congelación provenientes del deshielo del volcán Iztaccíhuatl.
De acuerdo a los expertos, para visitar la impresionante cascada congelada de Tlalmanalco, en los ríos manantiales y riachuelos de este destino, es mejor realizarlo bajo la supervisión de expertos que conozcan a la perfección estos terrenos, además de que debes acudir con el calzado adecuado y ropa aislante y calientita, dividido en varias capas, que te permitan mantenerte aislado de las bajas temperaturas invernales en estas altas montañas del centro de México.
Mejor época para disfrutar de la cascada congelada de Tlalmanalco
Al tratarse de un espectáculo congelado, los mejores meses para disfrutar de la cascada congelada son de diciembre hasta febrero, tiempo en que los termómetros alcanzan sus mínimas temperaturas en nuestro país, lo que mantienen inerte este espectáculo natural, dónde puedes disfrutar de una tarde de llena de belleza invernal en la cascada congelada de Tlalmanalco, ideal para disfrutar diversas actividades junto a toda la familia.