México es el fiel custodio de algunos de los destinos más increíbles que existen a nivel mundial, gracias a las maravillas naturales y arquitectónicas que se pueden disfrutar en unos días de estancia en nuestro país es que es uno de los más visitados por turistas internacionales y con más flujo por los viajeros internos que durante los días de vacaciones buscan escapar de la rutina y encontrar algunos destinos asombrosos.
Uno de estos entrañables destinos es precisamente este manantial rodeado de manglares e increíble belleza donde las aguas dulces y saladas se fusionan lo que otorga un espectáculo inolvidable a aquellos que se atreven a ser testigos de este increíble encuentro de fuerzas marinas que con el paso de los años ha capturado la atención de miles de turistas que acuden hasta este sitio para disfrutar este espectáculo único.
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La Tovara el destino donde se fusiona el agua salada del mar y el agua dulce de los manglares
Ubicada en las costas de Nayarit, este paraíso natural cuenta con increíble flora y fauna que puedes atravesar a través de una lancha donde te recargas de la imperdible carga de energía natural que te sorprende con algunas de las especies salvajes endémicas de este lugar y que puedes presenciar cual si fuera un safari acuático para, final sorprenderte con el impresionante encuentro entre las aguas dulces y saladas en el océano Pacífico.
Este Parque Nacional gracias a su ubicación única ve juntarse el agua dulce del manantial proveniente de las serranías, con el agua salada del mar, formando el increíble estero que sirve de hogar para miles de especies de aves, reptiles y peces, además de que en este increíble recorrido pues encontrarte increíbles especies salvajes que lo convierten en su hogar.
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Por si eso fuera poco en el nacimiento de sus aguas de manantial al final de uno de los recorridos hace sentir la sensación de estar en un oasis donde se pueden ver el fondo de 1 a 3 metros de profundidad y puedes sumergirte en chapuzón junto a toda tu familia, en la cristalinidad de estar increíbles aguas dulces que forman una alberca natural que llena los sentidos de los visitantes.