Este 15 de septiembre es la fiesta más grande de México, se trata de la Conmemoración de la Independencia, fue un Pueblo Mágico de Guanajuato donde inició el movimiento que dio inicio a la creación de la nación mexicana, con el grito del cura Miguel Hidalgo; sin embargo, fue la entrada a una ciudad que dio fin a este evento histórico.
Por ello, en esta nota te vamos a contar sobre este destino histórico con el que se consumó la Independencia de México, y con el que se reconoció a la nación mexicana como un país autónomo de España, tras 300 años de colonización.
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¿Cuál es la ciudad dónde se consumó la Independencia de México?
Fue la entrada del Ejército Trigarante a la Ciudad de México (CDMX) por la calle de Madero, que se dio fin a la lucha por la independencia, el 27 de septiembre de 1821, que era comandado por el coronel Agustín Iturbide. Al día siguiente fue cuando se firmó el Acta de Independencia, que fue redactada en el Palacio Nacional de la Ciudad de México, y actualmente se encuentra resguarda el Archivo General de la Nación.
¿Por qué se celebra la Independencia de México el 15 de septiembre?
La Independencia de México se celebra el 15 de septiembre porque fue en la noche de este día, pero en el año de 1810, que el cura Miguel Hidalgo dio el “Grito” de Independencia con el que se dio inicio al proceso de emancipación e independencia de la corona española, con el que el pueblo se levantó en armas.
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¿Cómo se celebra la Independencia de México?
La celebración más importante entorno a la Conmemoración de la Independencia de México es la que es llevada a cabo en Palacio Nacional, en el Zócalo de la Ciudad de México, donde el presidente en cargo realiza “El Grito” de Independencia tocando la campana ante los mexicanos reunidos en la Plaza de la Constitución con el fin de recrear este momento que dio inicio a este momento histórico, a las 24 horas.
Durante esta fecha los edificios del Centro Histórico de la CDMX son decorados con piezas iluminadas y alusivas a la celebración, se realizan conciertos, presentaciones culturales y espectáculo de fuegos pirotécnicos. Mientras que, en los hogares, se disfruta de una cena con platillos mexicanos, bebidas tradicionales y música regional a la espera del “Grito”.