Si nunca has vivido la experiencia de estar dentro de una cascada, sintiendo la fuerza de sus aguas caer desde 30 metros de altura, no hace falta gastar una fortuna ni caminar largas distancias para lograrlo. En el municipio de Hueytamalco, en la Sierra Norte de Puebla, podrás hacerlo de manera accesible. Allí se encuentra la impresionante cascada Plan de Guinea, un lugar único que puedes visitar por solo 10 pesos.
Desde el mirador, podrás observar la cascada desde arriba, junto al río que la alimenta, o vivir una experiencia aún más impactante: adentrarte en el interior de la cascada. Si te atreves a mojarte un poco, podrás ver cómo el agua cae frente a ti, creando una sensación indescriptible. Además, por solo 50 pesos, puedes disfrutar de la alberca en el sitio, ubicada entre palmeras y construcciones de piedra volcánica, desde donde también podrás admirar la cascada mientras te relajas.
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El lugar donde se encuentra la cascada, un centro ecoturístico, tiene diversas actividades para los amantes de la aventura, como rappel en la cascada, senderismo y más. Desde el centro del municipio de Hueytamalco, el trayecto hasta la cascada es de solo 15 minutos en auto. Si lo prefieres, puedes tomar un taxi o una van.
La cascada en Puebla que puedes admirar desde su interior
Para visitar la cascada Plan de Guinea en el municipio de Hueytamalco, desde Puebla de Zaragoza el viaje toma aproximadamente 2 horas y media, y desde la Ciudad de México, unas 4 horas y 20 minutos. Es recomendable llevar un buen calzado, ya que, aunque las caminatas no son largas, el terreno puede estar resbaladizo o con lodo.
Una vez allí, el recorrido a pie es de unos 20 minutos, atravesando plantaciones de bambú y una vegetación colorida. Al llegar a la cascada, podrás decidir si prefieres verla desde arriba o desde dentro, o hacer ambas opciones. Después de tu caminata, puedes disfrutar de la alberca y de una deliciosa comida en el lugar.
Si visitas la cascada durante la temporada de lluvias, podrás admirar el impresionante poder del agua. Sin embargo, si no te gusta mojarte, puedes optar por ir después de un período seco, cuando el agua aún fluye con fuerza pero sin empaparte. ¡Todo depende de lo que prefieras!