Si estás planeando una escapada desde la CDMX hacia uno de los lugares más lindos de Michoacán, déjanos decirte que el Pueblo Mágico Pátzcuaro puede ser ese destino que estabas buscando. Es un lugar lleno de historia, tradición y belleza natural, ideal para desconectarte un fin de semana. Pero antes de perderte entre sus calles empedradas, hay que hablar de lo más básico: ¿cuánto cuesta llegar hasta allá? Aquí te desglosamos todo para que puedas organizar tu viaje.
Llegar por carretera desde la Ciudad de México hasta Pátzcuaro es bastante sencillo. El trayecto es de aproximadamente 360 kilómetros y toma cerca de cuatro horas y media, dependiendo del tráfico. Se realiza principalmente por la autopista 15D, pasando por puntos como Toluca, Morelia y Zinapécuaro. Esta ruta tiene paisajes bellísimos, así que no te desesperes si el camino se alarga un poco. Solo asegúrate de salir temprano y llevar buena música.
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Ahora, hablemos de gastos. Para el viaje de ida pagarás alrededor de $891 pesos en casetas. Son varias: Tultepec, Jorobas, Zinapécuaro, entre otras. También necesitas unos 30 litros de gasolina por trayecto, lo que representa cerca de $700 pesos. En total, ida y vuelta, considera mínimo $3,180 pesos entre combustible y casetas. Es una inversión, sí, pero cada peso se compensa con la experiencia, y si son varias personas es menos gasto.
Una vez que llegues, una de las primeras cosas que debes hacer es subirte a una lancha y visitar la Isla de Janitzio. El embarcadero de San Pedrito es uno de los más usados y el boleto redondo cuesta unos $100. El paseo por el lago dura unos 40 minutos y es perfecto para tomar fotos, relajarte con el vaivén del agua y ver cómo el monumento a Morelos se alza entre las casitas como si estuviera vigilando el paisaje.
¿Qué atractivos hay para visitar en Pátzcuaro?
En el centro de Pátzcuaro puedes caminar sin rumbo y siempre descubrir algo interesante. La Plaza Vasco de Quiroga es un gran punto de partida, rodeada de edificios coloniales y árboles altos. A unos pasos tienes la Basílica de Nuestra Señora de la Salud, el antiguo Colegio Jesuita y varios museos que cuentan siglos de historia con solo cruzar una puerta.
Si te gusta curiosear entre cosas hechas a mano, no puedes dejar pasar la Casa de los Once Patios. Este lugar, que en su día fue un convento, ahora es un centro lleno de talleres artesanales. Desde textiles hasta muebles, todo allí tiene alma purépecha. Y si prefieres algo más aventurero, te puedes lanzar al mirador Estribo Grande: son 400 escalones hasta la cima, pero la vista del lago lo compensa.
La gastronomía es otro motivo por el cual vale la pena conocer este Pueblo Mágico. En el mercado local puedes probar uchepos, atole, carnitas, corundas y más delicias por menos de $100 pesos. No necesitas ir a un restaurante caro para comer bien. Incluso, muchos viajeros coinciden en que lo mejor se encuentra en los puestos pequeños, donde cocinan como en casa y todo sabe a tradición.
Pátzcuaro no solo es bonito, también tiene alma. Entre las danzas tradicionales, el sonido de las campanas, los atardeceres en el lago y las calles adoquinadas, hay algo que te invita a quedarte. Así que si aún no lo conoces, este es el momento para planear tu visita. Déjate sorprender por este rincón único de Michoacán.