PUEBLOS MÁGICOS

5 Pueblos Mágicos cerca de CDMX para una escapada exprés este finde

A pocas horas de la capital, estos destinos combinan historia, cultura y naturaleza. Perfectos para un viaje corto que se siente inolvidable.

Pueblos Mágicos.Pueblos Mágicos cerca de CDMX para una escapadaCréditos: Freepik.
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Cuando quieras un descanso corto sin organizar demasiado, los Pueblos Mágicos se convierten en una alternativa perfecta. Gran parte de ellos se encuentran a menos de tres horas de la Ciudad de México y brindan vivencias muy variadas que incluyen montañas, áreas verdes, antiguos conventos y relatos ligados a la minería.

Un par de días bastan para dejar atrás el caos urbano y caminar entre calles adoquinadas, degustar recetas tradicionales y sumergirse en costumbres que permanecen vivas desde hace siglos. La gran ventaja es que son destinos fáciles de visitar y, al mismo tiempo, muy distintos entre sí, lo que los hace ideales para una salida de fin de semana.

Cada Pueblo Mágico guarda un estilo propio, algunos destacan por su tranquilidad y contacto con la naturaleza, otros por la huella virreinal o por los vestigios de culturas originarias. Sin embargo, todos comparten un rasgo común que los une: la calidez de quienes los habitan.

Así que no lo pienses demasiado, arma una mochila ligera, lleva tu cámara y lánzate a explorar cinco rincones muy cercanos a la capital que logran transmitir la sensación de estar lejos sin recorrer grandes trayectos.

1. Tepotzotlán

A tan solo 50 km de la Ciudad de México se encuentra Tepotzotlán, famoso por el antiguo Colegio de San Francisco Javier, actual sede del Museo Nacional del Virreinato, que resguarda más de 34 mil piezas de arte religioso. El corazón del pueblo y el acueducto de Xalpa son sitios obligatorios para recorrer con calma y capturar buenas fotografías.

Este destino también ofrece alternativas distintas, como el Parque Ecológico Xochitla o la experiencia de elevarse en globo aerostático para contemplar la vista panorámica desde lo alto. Es un lugar que reúne pasado, cultura y entorno natural en una sola visita.

2. Villa del Carbón

A poco más de sesenta minutos desde la capital, Villa del Carbón se distingue por sus montes cubiertos de bosques y por su tradición en la elaboración artesanal de artículos de piel. Es perfecto para rentar una cabaña o acampar rodeado de encinos, pinos y oyameles.

El centro histórico mantiene un aire colonial con la Plaza Hidalgo, su kiosco tradicional y la iglesia dedicada a la Virgen de la Peña de Francia. Además, podrás entrar a talleres donde se producen cinturones, zapatos y bolsos de gran calidad trabajados de manera artesanal.

3. El Oro

Este poblado mexiquense fue en el siglo XIX uno de los referentes más destacados de la minería a nivel mundial. En la actualidad, su herencia permanece visible en construcciones como el Teatro Juárez y la sede del Ayuntamiento, recintos donde aún se percibe la grandeza de aquella época dorada.

Entre sus atractivos naturales se encuentran las presas Victoria y Brockman, ideales para recorrer en bicicleta, practicar senderismo o relajarse con una tarde de pesca. Durante los meses fríos, muy cerca se puede apreciar el increíble fenómeno migratorio de la mariposa monarca en el Santuario La Mesa.

4. Tlayacapan

Situado en Morelos y a menos de dos horas desde la capital del país, este Pueblo Mágico conserva su trazado de origen prehispánico. Entre los sitios de mayor interés sobresalen el Ex Convento de San Juan Bautista, que forma parte del Patrimonio Mundial, y el Palacio Municipal, reconocido como uno de los más antiguos del territorio nacional.

Además de sus numerosas capillas, 18 en total, Tlayacapan es cuna del famoso “brinco del chinelo”, baile popular que nació en esta comunidad. Su cocina típica también cautiva con especialidades como el tamal de ceniza, la cecina y la longaniza preparada al estilo local.

Destinos mágicos. Fuente: Especial

5. Tepoztlán

Rodeado de montañas y formaciones rocosas, Tepoztlán se ha convertido en un destino preferido para quienes buscan un ambiente espiritual y de relajación. Subir hasta la cima del Tepozteco es la actividad más conocida, pues desde ahí se disfrutan panorámicas impresionantes y se visita la pirámide construida en honor al dios Ometochtli.

Tras la caminata, el corazón del pueblo invita a probar platillos tradicionales, adquirir artesanías o simplemente descansar en su atmósfera tranquila. Muchos turistas también aprovechan para experimentar sus centros de spa y retiros de bienestar integral.