Cuajimalpa es considerado un Barrio Mágico por su diversidad cultural, su riqueza histórica y su abundante naturaleza que representa un oasis en medio de la urbe, ahí se respira un aire relajado y tranquilo, muy diferente al resto de la CDMX. Además, es famosa por resguardar el distrito financiero de Santa Fe, que tiene una amplia actividad comercial y un parque de grandes áreas verdes, perfecto para pasar el día en familia, el parque La Mexicana.
Cuajimalpa es un lugar de contrastes, por un lado todavía conserva su atmósfera provinciana y de pueblo tradicional en el que los habitantes pasan la tarde en sus plazas y jardines y por el otro resguarda restaurantes, hoteles y plazas de lujo. Aquí hay que visitar el centro para conocer su arquitectura, sus templos y museos, aunque también es imperdible una visita al Desierto de los Leones y la región boscosa.
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Caminar por el centro
El centro del Barrio Mágico de Cuajimalpa conserva su esencia relajada, hay que caminar por el centro y descubrir sus jardines y plaza principal. En el jardín Hidalgo está el quiosco que es el corazón del barrio, hay que sentarse a descansar y disfrutar el aire fresco que proviene del bosque y luego visitar el Foro Pedro Infante y la Parroquia de San Pedro Apóstol que en su interior resguarda pinturas al oleo.
Ir al Desierto de los Leones
En Cuajimalpa se ubica el Desierto de los Leones, una región boscosa que además de proporcionar oxígeno a la Ciudad de México, se proyecta como un ámbito ideal para diversas actividades ecoturísticas. Es ideal para pasear en bicicleta, hacer senderismo, comer en alguno de los restaurantes rústicos o hacer un picnic en el bosque. Allí se Ex Convento Carmelita que acoge al Museo Bicentenario, en donde se exhiben fotografías antiguas entre otras reliquias históricas.
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Visitar el Museo Zapata
Dentro del exconvento carmelita está el Museo Zapata, ambientado como si fuera un cuartel y allí se exhiben fotografías del Caudillo del Sur. También hay una réplica de un campamento de los zapatistas, un tianguis de los días revolucionaros, y una colección de rifles tipo máuser. Si quieres algo dulce después del recorrido hay que parar en el kilómetro 23.5 donde se encuentra un local de fresas con crema, con más de 40 años de tradición.
Hacer un picnic en el parque La Mexicana
El Parque la Mexicana es el segundo más grande de la CDMX, es un lugar para relajarse, rodeado de áreas verdes y de rascacielos. El Parque La mexicana alberga más de tres mil especies de árboles, lagos, jardines, puentes, plazas y andadores que te llevan de un punto a otro. Está en Lomas de Santa Fe, también tiene un jardín canino con rampas, andadores y juegos, y más de diez propuestas para comer. Además acoge dos lagos artificiales y humedales en los que habitan algunas especies.
Ir al Parque Nacional La Marquesa
La Marquesa fue declarada Parque Nacional y su nombre original es Parque Insurgente Miguel Hidalgo y Costilla. Cuenta con Es una extensión de 1,760 hectáreas de bosque y áreas para actividades recreativas. De acuerdo con la historia, después de la Conquista, Hernán Cortés otorgó a Juana de Zúñiga el permiso para fundar una hacienda a la que se nombró La Marquesa. Actualmente es de los lugares preferidos por los capitalinos para pasar los fines de semana en contacto con la naturaleza, en sus valles, miradores y restaurantes rústicos.