La Secretaría Nacional de Antropología y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) están por incluir al sitio Huapalcalco, ubicado en Hidalgo, como Zona de Monumentos Arqueológicos, según lo anunciado en el Diario Oficial de la Federación (DOF). Todo esto con base en lo dispuesto en la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos, como parte de un plan de protección del patrimonio mundial y cultural.
Huapalcalco, en el Estado de Hidalgo obtendrá la declaratoria como zona de monumentos arqueológicos, la máxima protección que contempla la ley mexicana, la misma con la que cuenta Teotihuacán, en el Estado de México, Palenque, en Chiapas, o Chichen Itzá, en Yucatán. El objetivo de esta declaratoria tiene como principal objetivo proteger el sitio ubicado en el municipio de Tulancingo y así evitar que los lugareños sigan saqueando las piedras del antiguo centro ceremonial para construir viviendas.
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Rodolfo Palma Rojo, entonces delegado del INAH, detalló a La Jornada Maya que los vecinos extraían piedras de los templos, así como otro tipo de vestigios prehispánicos para construir sus casas, es así como nace el interés del instituto por hacer preservar el lugar porque no cuenta con la declaratoria de zona de monumentos arqueológicos. Huapalcalco es uno de los asentamientos más antiguos de América y se tiene registros de que fue poblado por primera vez hace al menos 16 mil años.
¿Cómo es el sitio de Huapalcalco, en Hidalgo?
Es un sitio formado por un conjunto de monumentos piramidales, los cuales según el INAH tienen una influencia teotihuacana; hay una plaza con una estela y un altar. Otro de los hallazgos importantes del complejo es un hacha y puntas de proyectil que datan desde el año 7000 antes de Cristo, así como pinturas en piedra y una escultura del dios del fuego.
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Huapalcalco tiene una superficie total de 20 hectáreas que tiene las construcciones, donde destaca su área ceremonial ataviada de estructuras plataformas y basamentos, de especial explotación, producción y comercio de obsidiana. Además, esta población establecida durante el Postclásico tardío se caracteriza por sus materiales cerámicos de la fase Azteca III y IV de la Cuenca de México. La declaración como Zona Arqueológica impedirá la construcción y excavación en el área señalada con el fin de proteger su conservación, tal y como se ha llevado a cabo estos últimos días.