TRADICIÓN

3 Cantinas tradicionales que debes conocer en el Centro Histórico de la CDMX

En estos lugares se pueden disfrutar tanto de bebidas y menús gastronómicos en compañía de la familia o de los amigos y hasta escuchar historias de acontecimientos históricos que ahí ocurrieron

La ópera.Forma parte del recorrido de cantinas históricas del centro históricoCréditos: La ópera
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Hasta hace unos años, las cantinas eran lugares exclusivos de los hombres, pero hoy son sitios de reunión familiares en los que se pueden disfrutar de exquisitos menús gastronómicos, saciar la sed, escuchar historias y leyendas de antaño y rememorar acontecimientos históricos que ahí sucedieron. En la CDMX existe un extenso menú de cantinas antiguas y tradicionales que debes conocer y que son el pretexto perfecto para una reunión entre amigos.

Estas cantinas son también un punto de encuentro, el sitio donde se celebran los triunfos de nuestro de nuestro equipo favorito o  una noche bohemia para olvidar la rutina, en ellas tienen lugar largas pláticas y por sus puertas han pasado personajes destacados como Pancho Villa y Emiliano Zapata, además sus muros han visto pasar en tiempo y son testigo de los cambios que ha sufrido la urbe a lo largo de su historia, por eso, esta es una ruta obligada cuando estés de paseo por el Centro Histórico.

Cantina La Ópera

La cantina La Ópera abrió sus puertas en 1895 en la esquina de 5 de mayo y Filomeno Mata y desde entonces ha recibido a una gran cantidad de personajes como Porfirio Díaz y su esposa Carmelita Romero quienes eran clientes frecuentes de este lugar además de toda y una sociedad de la clase más alta. En sus mesas también se sentaron intelectuales y escritores como Carlos Fuentes. Carlos Monsiváis, José Luis Cuevas, Gabriel García Márquez, Octavio Paz, Sofía Basi, entre otros. Uno de sus atractivos principales es el agujero que quedó en el techo como producto del balazo que lanzó  al aire el revolucionario Pancho Villa. Su decoración, rememora la nostalgia de los tiempos antiguos de la CDMX y ahí podrás disfrutar sus platillos estrella como "lengua a la veracruzana", “pulpo a la gallega”, "caracoles en chipotle", chamorro a la gallega" entre otros. Está en la calle 5 de mayo número 10, en el Centro Histórico. Abre de lunes a sábado de 13:00 a 00:00 horas y domingos de 1:00 a 6:00de la tarde.

La Peninsular

En Alhóndiga número 26, en el centro de la CDMX está la Peninsular, una cantina cuyo origen se remonta a 1872 y desde entonces, se convirtió en el sitio favorito de los bohemios y de incontables personajes como Lucha Villa y José José. También fue escenario de películas como "El Callejón de los Milagros" y como parte de sus curiosidades, ahí circula  una tarjeta que tiene impreso un “permiso legal” para hombres casados en el que se lee: “Hago constar por la presente, que autorizo a mi pareja para que se divierta cuando quiera y pueda, beba hasta emborracharse, juegue y se distraiga con cuantas señoras y señoritas se le presenten. Firman la señora y la suegra”. Además de ser punto de reunión para largas pláticas con bebida en mano, el lugar ofrece un menú de botanas como sopas, carnes enchiladas, tostadas de pata o quesadillas y también hay especialidades a la carta preparadas por un chef, entre los que están las enchiladas Tomatlán y la pechuga princesa Aztlán. Los fines de semana orquesta en vivo.

El Gallo de Oro

Cantina El Gallo de Oro, nació en 1874. Foto: FB, el Gallo de Oro

Ubicada en la calle Venustiano Carranza número 35 la cantina El Gallo de Oro es una de las de mayor tradición en la CDMX, su historia se remonta a1874 cuando escritores, políticos y figuras del arte taurino asistían para saciar su sed y vivir el ambiente bohemio de la época. Hoy es una de las preferidas de los habitantes de la urbe pues además de su extenso menú de bebidas también cuenta con una .amplia carta de alimentos de la cocina tradicional. A El Gallo de Oro acudían poetas, políticos como Ignacio Manuel Altamirano, Antonio García Cubas, Ignacio Ramírez y Manuel Rivera Cambas y hasta ex reclusos de Lecumberri como el famoso Estrangulador de Tacuba, Goyo Cárdenas.  Los pepitos creados por Longino Vilchis y sus elegantes gabinetes en forma de herradura son algunos de los atractivos de esta cantina que tiene 150 años.