Nuestra nación es una región muy encantadora, ya que en sus diferentes estados podemos ser parte de bellas costumbres que le dan vida a las localidades que se resguardan en su interior y con ello, un colorido espectacular a sus espacios, elementos que hacen aún más atractivo a nuestro país, ya que muchos viajeros llegan hasta esta parte del mundo, con el fin de disfrutar las tradiciones, celebraciones, ritos y festividades religiosas que envuelven a México en un ambiente mágico, como de ensueño.
Si de tradiciones espectaculares se trata, el estado de Oaxaca es una entidad que no se queda atrás, ya que además de su deliciosa gastronomía regional, sus bellas playas, Pueblos Mágicos y su amplia variedad cultural, cuenta con una de las fiestas más representativas del país, La Guelaguetza, un evento enorme y épico que debes conocer en uno de tus viajes hacia el sur, para disfrutar de las calles del centro histórico de la ciudad de Oaxaca, que se llenan de vida a través de los bailables y espectáculos culturales que nacieron de un terremoto, pues a continuación vamos a conocer más sobre el origen de este hermoso festejo.
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¿Cómo nace La Guelaguetza?
Este 2022, La Guelaguetza se realizará el próximo 25 de julio y 01 de agosto, un evento lleno de colorido que se caracteriza por sus bailes regionales, eventos culturales y mucha diversión, con un pasado maravilloso, pues se involucran varias costumbres indígenas, con una mezcla colonial encantadora, para dar paso a esta celebración, que puedes conocer en tus paseos por el bello estado de Oaxaca y deleitarte con sus delicias gastronómicas que resaltan de entre muchos otros platillos mexicanos, pues además de ser deliciosos son bastante económicos.
La Guelaguetza es una palabra que tiene origen en el vocablo zapoteco guendalezaa, que significa ‘ofrenda, presente o cumplimiento’ y se ha vuelto una de las tradiciones más populares en todo el estado. Esta fiesta tiene sus raíces en tiempos prehispánicos, pues comenzó en forma de ritual, que se la hacía a los dioses en un lugar que era denominado como cerro de la bella vista. Durante esos años, los antiguos mexicas adoraban a Centéotl, Diosa del Maíz y en este festejo, se llevaban a cabo varias actividades significativas para los lugareños.
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Además de esto, La Guelaguetza surgió como una forma de unificar a la población de Oaxaca tras un terremoto, como una iniciativa impulsada en 1932 para detener la migración. Para 1938, la diosa Centéotl, representada por la entonces adolescente de sólo 14 años, María Elena Sandoval Martínez, recorre la Rotonda de las Azucenas, que se encuentra en las faldas del Cerro del Fortín, pues fue ella la primera mujer que representó a esta deidad, a la que se le ofrecen algunos rituales para obtener una buena cosecha durante la temporada.
Esta fiesta nace por la necesidad de unir a los pobladores de la ciudad de Oaxaca, tras haber sufrido los estragos de un terremoto de 7.8 grados Richter, que sacudió al estado el 7 de enero de 1931, ya que después del sismo, hubo muchas réplicas constantes, que llenaron de miedo a los pobladores, motivo por el cual, las personas comenzaron a vender sus casas y terrenos, para buscar otras entidades donde vivir, sin tener que sufrir las inclemencias de un nuevo movimiento telúrico de tal magnitud, como el acontecido en esa fecha.
La Guelaguetza surgió entonces, como una forma de parar este fenómeno migratorio, una fiesta que estuvo a cargo de la sociedad civil, de la cultura y el arte, quienes planearon un homenaje a la cultura oaxaqueña, que reforzara la identidad entre los pobladores. En sus primeros años, los bailes eran representados por las siete regiones de la entidad y también por escuelas y grupos de danza contemporánea de esos años, así como atletas y artistas famosos, que engalanaban los escenarios, a través de actividades que se fueron nutriendo con el paso de los años, hasta dar forma a la fiesta de los Lunes del Cerro, que se realiza en el Cerro del Fortín, un lugar sagrado que debes conocer en uno de tus viajes.