Una de las cintas de Steven Spilberg que llamó la atención en 2004 es La Terminal, cuya interpretación de Tom Hanks como Victor Navorski, un ciudadano de un pequeño país del este de europa se ve afectado por estar exiliado en la terminal internacional del aeropuerto JFK de Nueva York cuando se desata una guerra civil en su tierra de origen. Aunque no muchos saben, esta historia está basada en hechos reales, precisamente en la historia de Mehran Karimi Nasseri.
Mehran Karimi Nasseri vivió en un aeropuerto de París y su historia inspiró la cinta 'La Terminal' dirigida por Steven Spielberg y protagonizada por Tom Hanks. Este hombre vivió por 18 años en el aeropuerto y fue así como nació esta historia que relata la vida de un hombre que no puede pisar suelo estadounidense ni subir a un avión, por eso se ve obligado a vivir en el aeropuerto, a tal punto de conocer a todos los trabajadores.
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¿Cuál es la historia real de la película La Terminal?
El iraní Mehran Karimi Nasseri vivió por 18 años en el aeropuerto Charles de Gaulle de París, Francia, uno de los más transitados del mundo. También conocido como Sir Alfred Mehran, el refugiado de Irán llegó en agosto de 1988, pero la realidad es que su historia comienza años atrás. El gobierno iraní dijo que Mehran estuvo involucrado en actividades "antigobierno" mientras cursó sus estudios en Inglaterra, específicamente por el gobierno de Shah Mohammed Reza Pahlavi, donde a su regresó a su país fue encarcelado y después condenado al exilio en 1977.
Mehran pidió asilo en los países europeos como Italia, Alemania, Reino Unido, Países Bajos, etc; pero lo rechazaron. En Bélgica fue aceptada su petición y vivió ahí hasta 1986. Después llegó a París sin planearlo, ya que decidió a mudarse a Reino Unido, pero en el camino sufrió el robo de su equipaje, por lo que logró tomar su vuelo programado desde París a la ciudad de Heathrow, pero al llegar ahí lo rechazaron porque no contaba con todos los documentos necesarios.
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Por ello, lo enviaron de vuelta al aeropuerto Charles De Gaulle, en París, donde vivió por 18 años, pues no se arreglaban los problemas de sus papeles. Las propias autoridades no le creían que era un refugiado, por lo que fue trasladado a la zona de espera, donde no podía irse ni quedarse. El limbo legal consistió en que no podía expulsarlo porque era refugiado, pero no estaba obligada a otorgarle permiso de tránsito.
Aunque Bélgica podía enviar sus documentos originales de Mehran Karimi Nasseri, no lo hizo, ya que aseguraron que el hombre debía ir personalmente a recogerlos. En 1999 Francia ofreció el pasaporte de refugiado y la oportunidad de vivir en ese país fuera del aeropuerto, pero Sir Alfred dijo que los documentos no lo reconocían como de Reino Unido, donde estudió, pues él decía ser de ahí y no de Irán.
El iraní recibió 250 mil dólares por los derechos de la película, así que en 2006 después de tener problemas de salud se obligó a hospitalizarse y después lo trasladaron a un albergue de París. Con el dinero de la cinta pudo mudarse a un hotel, pero en 2022 regresó a los pasillos del Charles de Gaulle, donde paseaba con sus pocas pertenencias en un carrito y fue aquí donde murió a los 77 años de edad debido a un infarto.