Se viene quizá la época más importante para todo el mundo, los días donde las familias buscan reunirse después de un largo periodo para disfrutar de su compañía, ponerse al tanto y celebrar la Navidad y recibir el Año Nuevo. Sin embargo, la OMS ha puesto un anuncio que ha preocupado a miles, en esta época donde se supone reina la alegría y el amor.
Se trata del estado de emergencia en el que se encuentra Zambia por el ántrax, un brote que no tiene precedentes, pues la última epidemia a gran escala que fue notificada en el país de África fue hace más de 10 años con un total de 511 casos sospechosos. Sin embargo, para el 20 de noviembre del 2023 se notificaron 684 casos humanos sospechosos. El epicentro de esta enfermedad se encuentra en Sinazongwe, con 287 casos. Y es debido al movimiento incontrolado de animales y cadáveres dentro del país y entre provincias que se busca de inmediato frenar la expansión de esta enfermedad, ya que el riesgo de que se propague es muy alto.
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¿Qué es el ántrax?
El llamado ántrax o carbunco es una enfermedad infecciosa grave que es causada por una bacteria nombrada Bacillus anthracis que por lo regular afecta a animales como las vacas, ovejas y cabras. Pese a ser poco común, llega a ocasionar síntomas graves por lo que tiene una alta tasa de mortalidad si no se trata. Las bacterias que causan el ántrax producen esporas o toxinas muy potentes que le permiten sobrevivir en el medio ambiente por un largo tiempo.
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¿Cómo se transmite?
Esta bacteria es zoonótica, quiere decir que se puede transmitir de animales a personas. Sin embargo, los seres humanos podemos desarrollarla a partir de animales infectados o con productos de animales contaminados. Cuando las esporas se ingieren, inhalan o ingresan al cuerpo con cortes en la piel pueden germinar multiplicarse y producir toxinas muy potentes.
¿Cuáles son los síntomas?
Si el contagio fue cutáneo, aparecerá una llaga en la zona expuesta que provoca picazón y se vuelve color negro, se puede presentar dolor de cabeza, dolor muscular, fiebre, náuseas y vómitos.
Si el contagio fue gastrointestinal: todo podría comenzar como una intoxicación pero que irá empeorando hasta terminar con dolor abdominal intenso, vómitos con sangre y diarrea.
Si es ántrax pulmonar, aparece como un síntoma de resfriado que evolucionará a problemas para respirar graves y shock. Este es el más grave, sin embargo la primera es la más común.