Una de las playas favoritas de los capitalinos es Acapulco, ya que se encuentra a solo unas cuantas horas de la CDMX. Se encuentra en la costa del Pacífico de México y es uno de los sitios con una ubicación privilegiada, a menos de 400 kilómetros desde la capital del país y con increíbles atardeceres. Las costas de Guerrero son hermosas, pero ver el paisaje costero de Acapulco es conocer uno de los sitios emblemáticos para la vida nocturna, playas y golf.
Toma nota de cuánto te cuesta viajar desde la CDMX a Acapulco por carretera, mientras poco a poco descubres las montañas de la Sierra Madre del Sur. Miles de turistas optan por este destino para vacacionar, ya que también se encuentra cerca de Morelos, Estado de México y Puebla. Acapulco es la playa preferida de muchos, ya que aprovechan los puentes vacacionales o los fines de semana para descansar en este sitio, pues hay hoteles para todo tipo de presupuesto.
¿Cuánto cuesta viajar a Acapulco desde la CDMX?
Las hermosas aguas de Acapulco se encuentran a solo 5 horas desde la CDMX, para un viaje en auto, y para llegar debes dirigirte a la Autopista del Sol, México- Acapulco. Durante tu trayecto por la carretera tendrás que pagar seis casetas de cobro, pero no solo eso, también el costo de gasolina de tu auto. Aquí te presentaremos los precios que tiene la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en su app 'Traza tu ruta'.
La primera caseta es la Tlalpan que tiene un costo de 136 pesos, luego deberás atravesar la caseta de Alpuyeca y pagar 86 pesos. Una vez que termines de cruzar por Morelos, debes pagar la caseta Paso Morelos de 182 pesos, para luego Palo Blanco de 168 pesos. Las dos últimas casetas de la CDMX para Acapulco son La Venta de 149 pesos y Maxitúnel de 101 pesos. El costo total de la Ciudad de México a Acapulco por carretera fue de 822 pesos.
Recuerda que para poder viajar por carretera lo ideal es revisar tu carro para poder viajar sin preocupaciones. Así como llevar un kit de herramientas mecánicas como gato, señalizaciones, y tener los teléfonos de emergencia a la mano. Respeta los límites de velocidad, señalamientos y recuerda viajar sin cansancio o sueño.