Una de las zonas arqueológicas más importantes y visitadas de la Riviera Maya, es la antigua ciudad prehispánica de Chichén Itzá que significa “la ciudad al borde del pozo de los Itzáes”, ubicada a tan sólo 115 kilómetros de Mérida, Yucatán.
Entre sus vestigios más importantes se encuentra la Pirámide de Kukulcán, también conocida como “El Castillo”, está conformada con cuatro lados y un templo en la parte superior. Es una de las obras mayas de gran relevancia, ya que es en realidad un calendario solar.
Gracias a su arquitectura con las sombras formadas por los primeros rayos del sol, marca la llegada del equinoccio con el “descenso de Kukulcán” que crea una silueta en forma de serpiente, lo que demuestra el amplio conocimiento que tenían sobre la astronomía y arquitectura. Un fenómeno que sorprende a los extranjeros, sin embargo, no es la única maravilla que resguarda esta pirámide.
¿Qué hay debajo de la pirámide de Kukulcán?
En una investigación realizada por investigadores de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) se descubrió que debajo de la pirámide de Kukulcán se encuentra un cenote, en un costado al interior de la pirámide.
Este descubrimiento fue posible gracias a la tecnología, se colocaron 96 electrodos alrededor de la pirámide para escanear el subsuelo hasta 26 metros de profundidad. René Chávez, investigador del Instituto de Geofísica de la UNAM señala que a pesar de que, se sabe que para la cultura maya los cenotes son relevantes, no se sabe la razón por la que construyeron una pirámide encima de uno.
De acuerdo con un boletín emitido por la UNAM, el investigador señaló en conferencia de prensa que se trata de un cuerpo de agua que mide de 20 a 25 metros de largo y está cubierto con una capa de roca caliza de aproximadamente cuatro metros, sin embargo, no se logró determinar la profundidad del cenote. Se prevé que a futuro la capa de roca se caiga, para dejar al descubierto el cuerpo de agua.
Este hecho no afectará a la estructura de la pirámide de Kukulcán, ya que el cenote se encuentra en un costado. Sin embargo, es posible que en su interior pueda observarse. Por ello, los investigadores siguen realizando estudios para determinar la estructura interior de la pirámide y si hay pasadizos hasta el cenote.