Ya estamos en 2025 y, con este inicio de año, ya queremos empezar a planear nuestros viajes y vacaciones. Sin embargo, muchas veces nos cuesta organizarnos y lograr metas de ahorro. Cuando llegan las vacaciones, no conseguimos planificar para visitar nuestros destinos soñados. Para resolver esto, existe una regla de ahorro llamada 50/30/20, que puede ser una gran aliada para alcanzar esas metas de viajes.
Comencemos aclarando en qué consiste esta regla y sus cifras. Se trata de un método para dividir los ingresos mensuales, ya sea que los administres de forma individual o familiar. Por ejemplo, si eres una persona autónoma y tu ingreso mensual es de 15,000 pesos, la distribución sería de la siguiente manera: el 50% se destina a necesidades primarias, como vivienda, alimentos, transporte, educación, salud y ropa o calzado. Un 30% se reserva para "caprichos", que incluyen entretenimiento, salidas a comer, visitas a parques de diversiones, entre otros. Finalmente, el 20% se asigna al ahorro para el futuro, que en este caso podría destinarse a viajes.
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La ventaja de esta forma de ahorrar y distribuir los ingresos mensuales es que establece un porcentaje fijo para el ahorro. Esto evita depender de lo que quede al final del mes y asegura que siempre se esté acumulando dinero para alcanzar tus metas. Al considerarlo un gasto fijo, sabes que mes a mes estarás sumando a tu fondo destinado para estos propósitos. ¡A viajar se ha dicho!
De acuerdo con los expertos en finanzas, lo más recomendable es guardar los ahorros en una cuenta de ahorros. El antiguo método de almacenar efectivo en casa, como debajo del colchón o en lugares ocultos, puede ser contraproducente, ya que facilita el acceso al dinero y aumenta las probabilidades de gastarlo en cosas que no son tus objetivos principales.
¿Cómo ahorrar para lograr mis metas de viaje en 2025?
La regla de ahorro 50/20/30 puede ser útil para proyectos de viajes, ya sea a destinos cercanos o más lejanos y costosos. Por ejemplo, si deseas realizar cinco viajes cortos durante el año, aprovechando puentes escolares o días de descanso obligatorios, podrías destinar parte del 20% mensual a estos viajes y ahorrar el resto para un viaje más largo en las vacaciones de invierno o verano.
Volviendo al ejemplo de un ingreso mensual de 15,000 pesos, la distribución sería así: el 50% para necesidades primarias equivaldría a 7,500 pesos, el 30% para "caprichos" sería de 4,500 pesos, y el 20% para ahorro sería de 3,000 pesos. Al final del año, con un ahorro mensual de 3,000 pesos, habrías acumulado 36,000 pesos.
Esto podría ser suficiente para realizar cinco viajes cortos y un viaje largo. Por ejemplo, podrías destinar 15,000 pesos a los viajes cortos, asignando 3,000 a cada uno, y reservar los 21,000 restantes para un viaje largo, como a la playa o cualquier destino con el que sueñes.