En una pintoresca villa de Grecia, donde las callejuelas de piedra cuentan leyendas de antaño y el aroma a salitre flota desde los restaurantes costeros, un curioso protagonista se ha ganado el corazón de todos: su nombre es Chonkus Maximus, un felino enorme y adorable que ya es parte del alma del lugar.
Su popularidad despegó gracias a un clip compartido en TikTok, donde aparece echado en una butaca, como si fuera el rey del sitio. Su barriga prominente, su mirada despreocupada y su porte altanero bastaron para que se volviera tendencia. A raíz de eso, decenas de viajeros modificaron sus itinerarios solo para tener la oportunidad de saludarlo.
Te podría interesar
Si bien aparenta ser un minino sin dueño, Chonkus posee una energía especial que resulta evidente desde el primer instante. “Él no avanza, él se desliza”, comentó una visitante proveniente de Estados Unidos que decidió postergar su viaje en barco solo para cruzarse nuevamente con él. Y es que toparse con este animal no es algo común, se trata de un instante casi espiritual.
El impacto turístico que ha provocado es impresionante. Varios lo apodan “el Moodeng del Egeo”, aludiendo a un célebre hipopótamo de Tailandia que también capturó la atención digital. No faltan los comerciantes que ofrecen objetos con su image, desde prendas estampadas hasta tazones, pegatinas e incluso bebidas con su nombre. El famoso “Chonkus Cappuccino” existe y es reconocido por su abundante espuma, en homenaje a su cuerpo redondeado.
De estrella viral a leyenda del pueblo
Lo llamativo es que Chonkus no pertenece a nadie. Se mueve a su antojo, como si fuera parte del alma helénica, aunque siempre hay quienes lo cuidan en cada rincón del vecindario. Los lugareños se encargan de alimentarlo, mantenerlo a salvo del ruido excesivo y brindarle un lugar cómodo donde descansar. Incluso hay quienes temen que su popularidad crezca demasiado y ya han solicitado acciones para preservar su bienestar.
En algunas tiendas, tener una imagen junto a Chonkus puede traer beneficios. Ciertos locales regalan latas de pescado o recuerdos a quienes demuestran haberlo encontrado. Su presencia ha sido tan influyente en el movimiento comercial del pueblo, que ya hay quienes lo reconocen como una joya cultural que debe protegerse.
¿Dónde encontrar a Chonkus Maximus?
No tiene un lugar propio donde viva, pero suele dejarse ver en puntos ya conocidos, estirado bajo el sol sobre un muro antiguo, reposando junto a las entradas de los locales o acercándose con curiosidad a quienes están disfrutando algo sabroso. Y si no le prestas atención, es probable que igual se siente cerca tuyo.
Hay quienes aseguran que, después de cruzarse con Chonkus, los paisajes históricos, el azul del agua e incluso la majestuosa Acrópolis parecen perder parte de su encanto. No es fácil superar a un minino que conquista a todos con una simple mirada.
Datos clave si quieres ver a Chonkus Maximus
- ¿En qué parte de Grecia está Chonkus?
En una aldea costera que no se ha revelado, para evitar el turismo masivo.
- ¿Es posible encontrarlo siempre?
No hay garantía, pero suele aparecer al mediodía o al atardecer en zonas con sombra y comida.
- ¿Se lo puede acariciar?
Solo si él se acerca primero. Tiene sus reglas.
- ¿Los negocios locales lo reconocen?
Sí. Muchos ofrecen productos o descuentos si demuestras que lo viste.
- ¿Está protegido de algún modo?
No oficialmente, pero los vecinos cuidan de él con devoción.