Sin duda alguna visitar los santuarios de las mariposas Monarcas es una gran experiencia que podemos disfrutar, principalmente en la época de invierno en la que cada año miles de ejemplares llegan a nuestro país.
De acuerdo con datos de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, se tiene estimado que anualmente realizan un viaje de alrededor de tres, recorriendo una distancia entre los 2 mil y 4 mil 500 km.
Te podría interesar
Para llegar a nuestro territorio, las mariposas monarca atraviesan 9 estados de la República Mexicana que son: Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, Zacatecas, Querétaro, Aguascalientes, Guanajuato, San Luis Potosí e Hidalgo.
¿Dónde están las mariposas monarcas en el Estado de México?
Aquí te presentamos 3 santuarios que existen en nuestro país, principalmente en los estados de Michoacán y el Estado de México.
Te podría interesar
¡No te pierdas la oportunidad visitarlas en su hábitat natural!
- El Rosario:
Ubicado en el municipio de Ocampo, Michoacán, este santuario se encuentra dentro de la “Reserva de la Biósfera de la Mariposa Monarca”, la cual también es considerada como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Y está abierto desde el mes de noviembre hasta marzo. La entrada ronda entre los $45 pesos. Además, se encuentra muy cerca del pueblo mágico Angangueo.
- La Mesa:
Se encuentra en la Sierra Campanario, Estado de México. Es un ejido que ofrece una zona boscosa de oyameles, visitas guiadas a las colonias de hibernación de la mariposa monarca, así como un criadero de venados que los turistas también pueden visitar. También podrás disfrutar de increíbles vistas al cielo durante las noches, gracias a la ubicación de las cabañas.
- El capulín:
Se ubica en el cerro Pelón, Valle de Bravo. Además de ofrecer paisajes llenos de vegetación y grandes vistas, consta de 4 km de recorrido de colonias de hibernación. También podrás hospedarte en cabañas tradicionales y podrás cabalgar.
No olvides seguir al pie de la letra las indicaciones de los guías o cuidadores locales de los santuarios, como: caminar únicamente por los senderos que se han acondicionado, no introducir alimentos, bebidas alcohólicas, objetos punzo-cortantes, armas de fuego ni mascotas.