México es una nación llena de lugares mágicos donde podemos hacer recorridos sensoriales que nos envuelven en un ambiente cálido, ameno y tranquilo, especialmente cuando nos aventuramos para hacer una ESCAPADA a través de sus sabores, con rutas espectaculares que deleitan el paladar de cualquiera, incluyendo los más exigentes. 

En esta temporada de frío se antoja hacer un viaje a sitios donde podamos sentir ese ambiente de armonía, acompañados de sabores cálidos, paisajes extraordinarios y actividades que nos acerquen a las costumbres locales, algo que podemos aprovechar durante un recorrido por la ruta del cacao en el estado de Tabasco, un recorrido perfecto para aprovechar el frío y probar esta deliciosa bebida calientita. 

¿Cuál es la ruta del cacao en Tabasco? 

El recorrido comienza en Comalcalco, el primer municipio donde tu sentido del gusto se pondrá a prueba. Se trata del primer municipio de la entidad en el que se puede aprender sobre la historia de este ingrediente, muy usado en las culturas antiguas, especialmente en la civilización maya, pues la vida de los habitantes de esta cultura, se organizaban en torno a este fruto, que era consumido por las clases altas o como bebida energética y medicinal.  

Aquí podrás adentrarte en distintas haciendas cacaoteras, como la Hacienda de la Luz, ubicada en Chontalpa, donde se ofrecen algunos recorridos guiados a través de los plantíos, donde aprenderás sobre el proceso de cultivo y cosecha, hasta la parte de la producción, con la posibilidad de probar una deliciosa bebida calientita y espumosa, en medio de una diversidad de árboles y escenarios naturales. 

El recorrido sigue hasta Paraíso, una zona que además de experiencias cacaoteras, cuenta con varios sitios de aguas termales, lagunas y playas encantadoras, un espacio perfecto para descansar con toda la familia, en el que también puedes acercarte al proceso de cultivo de estas semillas, con una amplia oferta gastronómica para acompañar tu bebida, lo cual incluye pescados y mariscos. 

La ruta continúa hacia Cunduacán, la parte final de nuestro itinerario, un sitio resguardado por grandes tesoros, de entre los cuales destaca la Hacienda La Chonita, que data del año 1800 y fue habitada por Santiago Cruces Zentella, un antiguo gobernador de Tabasco. Aquí se ofrece un taller de chocolate, venta de chocolates de muchas variedades, elaborados con el cacao de esta región y algunas otras actividades complementarias. 

Entre los recorridos que puedes realizar se encuentra dar un paseo en kayak, visitas guiadas en bicicleta, pesca, una sesión de temazcal tradicional y varias otras experiencias. Para conocer el proceso del cacao de primera mano, puedes hacer una parada por la Finca Génesis, donde se dan recorridos a través de los plantíos, que además cuenta con degustaciones y venta de productos orgánicos, el plan ideal para viajar con tu amorcito y dejarse consentir con estos bellos escenarios y un delicioso chocolate caliente recién preparado.