ESCAPADA A LA NATURALEZA

Cómo llegar a las cascadas de Michoacán conocidas como las Niágara mexicanas

El sitio es ideal para ir en familia y ofrece actividades de ecoturismo y lugares para comer y pescar

Cascadas del Niágara mexicanas.Este paraíso michoacano ofrece contacto íntimo con la naturalezaCréditos: Michoacán travel
Escrito en DESTINOS el

Por su abundante cauce que aumenta durante la temporada de lluvias y su espectacular caída, estas cascadas son consideradas como las Niágara mexicanas. Se localizan en medio de un paraje natural cubierto por bosques y se alimentan del río Lerma que nace en el Estado de México y recorre los estados de Querétaro y Guanajuato hasta llegar a Michoacán, donde sigue su rumbo hasta desembocar en el Lago de Chapala en Jalisco.

Su caída mide unos 30 metros de altura y aunque se pueden apreciar durante todo el año, es en los meses de lluvia cuando son más deslumbrantes y bellas. Estas cataratas son una parada obligada en tu viaje por Michoacán por lo que si te gusta la naturaleza y buscas un sitio para desconectarte de la ciudad, son el mejor lugar para hacerlo. Te decimos cómo llegar.

Cómo llegar a las cascadas michoacanas

17 km de La Piedad, en Michoacán, están las cataratas de El Salto, de aproximadamente 30 metros de altura, están inmersas en medio de un bosque abundante que es hábitat de diversas especies de aves y mamíferos. Además de admirar su espectacular caída se puede pescar si se tiene suerte ya que en ocasiones, el río trae consigo bagres, truchas y tilapias de agua dulce.

Puedes llegar por el lado de Guanajuato o de Michoacán. Si viajas en auto desde Morelia debes tomar la autopista que va hacia Guadalajara. Una vez que pasas la caseta de Panindícuaro debes seguir derecho hasta llegar a la caseta de Ecuandureo donde se encuentra  el entronque para ir a La Piedad. Luego sigue los señalamientos hasta el ejido donde se encuentran las cascadas. El tiempo estimado de viaje es de dos horas y el costo de las casetas es de 230 pesos.

Cascadas de El Salto en Michoacán. Foto: Michoacán Travel

Para entrar solo debes pagar una cuota voluntaria, de entre 15 y 20 pesos. En el lugar hay pequeños restaurantes rústicos para comer truchas y otros platillos locales, aunque no se recomienda nadar en el sitio, por la corriente del rio y la fuerza del agua. En el sitio también se venden bebidas frías y se ofrecen caminatas por los alrededores. Es un sitio para ir en familia aunque la sugerencia es cuidar bien a los niños pequeños para evitar caídas o accidentes.