Ubicado en el Camino Real de Tierra Adentro, considerado Patrimonio de la Humanidad, San Juan del Río, Querétaro presume un rico legado histórico, principalmente en su Centro Histórico, pero también en sus alrededores donde se levantan hermosas haciendas que se remontan a la época colonial y que hoy son espacios donde se pueden vivir experiencias para toda la familia.
Entre las edificaciones más bellas que muestran el esplendor de San Juan del Río está la Parroquia de San Juan Bautista y el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, ubicadas en el Jardín de los Fundadores, pero también es posible admirar esta bonanza en sus haciendas que hoy se han reinventado y que es posible conocer en un fin de semana.
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1. Hacienda La Llave
La llave es la Joya de la corona de las haciendas queretanas ubicadas en los alrededores de San Juan del Río. El casco de esta hacienda fue remodelado por la familia Iturbe, con la consigna de que debía parecerse al Palacio de Versalles, sin embargo, su construcción se remonta al año 1531 y fue uno de los soldados más cercanos a Hernán Cortés quien la edificó. Hoy, en su diseño también destacan los estilos neoclásico y art noveau. Cuenta con hermosos jardines y aunque no es un espacio totalmente abierto al público puedes solicitar un recorrido guiado en la dirección de turismo de Querétaro. Lo que sí puedes visitar es su capilla que posee una nave con un cielo repleto de estrellas. Se dice que los restos de La Malinche descansan en algún lugar de esta hacienda.
2. Hacienda La Venta
Actualmente es un hotel que conserva vestigios originales del siglo XVI en las caballerizas y la casona. Fue construida en 1584 como un lugar de descanso para los viajeros que pasaban por el Camino Real de Tierra Adentro. Luego de haber funcionado como finca agrícola la Hacienda La Venta se reinventó para abrir sus puertas como hotel. Tiene 52 habitaciones y la casona principal aún conserva su traza original. En ella puedes admirar hermosos murales elaborados en el siglo XVI y que recrean una escena de cacería. También conserva un kiosco original, la troje, la zona de caballerizas y una puerta de hierro forjado con siluetas de animales. La Venta, además de hotel cuenta con salones para eventos y un restaurante que ofrece cocina mexicana y algunos platillos de gastronomía internacional.
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3. Hacienda Viborillas
La Hacienda Viborillas, además de ser un increíble lugar para eventos como bodas también tiene un restaurante llamado "Muro de piedra" que es visitado por muchas familias durante los fines de semana. Ubicada en las afueras de San Juan del Río, esta hacienda es una bella construcción del siglo XVIII y en su interior conserva un antiguo tren que es el escenario perfecto para la foto del recuerdo. Esta hacienda conserva su esencia mexicana y cuenta con jardines y diversos espacios para la celebración de eventos sociales, sin embargo, su espacio más emblemático es el Restaurante Muro de Piedra que ofrece cocina mexicana contemporánea.