La capital del país es una metrópoli con una gran oferta turística en todos sus espacios, alcaldías y pueblos, además de contar con los edificios más impresionantes que puedes conocer en un paseo por el Centro Histórico y las calles aledañas, museos, cafeterías y muchas opciones para todo el público.
Sin embargo, como habitantes de esta gran ciudad, en ocasiones buscamos escapar de los ajetreos cotidianos, el tránsito y los ruidos citadinos, para conectar con espacios más naturales, lugares históricos importantes y alguna otra actividad que nos ayude a sentirnos más relajados y conocer el amplio territorio nacional.
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Como viajeros frecuentes, buscar nuevos espacios que nos impresionen es una labor muy fascinante y es por eso que a continuación vamos a conocer 5 lugares muy cercanos a la CDMX, donde podrás disfrutar de un recorrido por las civilizaciones antiguas a través de sus pinturas rupestres, sitios maravillosos que puedes explorar estas vacaciones.
1. Guanajuato
El estado de Guanajuato es uno de los lugares preferidos por muchos viajeros, pues cuenta con una gran variedad cultural y diferentes recintos importantes que resguardan el pasado de México, y en esta ocasión descubrimos que también cuenta con pinturas rupestres que fueron encontradas hace algunos años en algunas regiones del estado que puedes visitar en tus fines de semana.
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Tierra Blanca, San Luis de la Paz, San Diego de la Unión, Xichú y Victoria, son los lugares que cuentan el paso de la historia de algunas civilizaciones antiguas que plasmaron su arte en las rocas, más de tres mil pinturas que puedes conocer en uno de tus viajes. Las fechas de su elaboración se demontan a un periodo entre el siglo I y X d.C.
2. Tamaulipas
La Sierra de San Carlos es otro enigmático lugar que resguarda algunas de estas magistrales obras de tiempos antiguos, vestigios del paso de algunas civilizaciones que han quedado plasmadas sobre las rocas para deleitar a los viajeros que están fascinados con las diferentes obras de arte que en el pasado, eran consideradas como un lenguaje natural a través del cual se representaba la vida cotidiana.
En el año 2013 fueron halladas estas pinturas rupestres en las cuevas y cañadas de la Sierra de San Carlos, con más de 5 mil pinturas que se encuentran en toda esta zona. La mayoría de ellas están bien conservadas y se cree que fueron realizadas por tres grupos principales de cazadores-recolectores prehispánicos: guajolotes, iconopios y los pintos, en este majestuoso espacio natural.
3. Amatlán, Morelos
Otro de los destinos más cercanos a la CDMX que cuenta con varios puntos de interés para los viajeros es el estado de Morelos, que por su cercanía a la capital del país, se vuelve un destino por excelencia para disfrutar de un buen fin de semana en alguno de sus sitios de aguas naturales o al recorrer las calles de sus diferentes pueblos mágicos.
En Amatlán de Quetzalcóatl, al interior de la montaña, en una cueva, a unos cuantos pasos de un lugar conocido como el Portal al Infinito, se han localizado diferentes pinturas rupestres que le dan aún más misticismo a la zona de Tepoztlán, haciendo de este enigmático lugar, uno de los puntos que debes conocer si quieres ver pinturas de este tipo en tus viajes por México.
4. Yecapixcla, Morelos
Este es otro de los lugares más concurridos del estado de Morelos, un sitio maravilloso, rodeado por bellos paisajes naturales, sitios históricos impresionantes, la mejor gastronomía y un pasado fascinante que nos recuerda que las civilizaciones antiguas, eran expertas en dominar ciertos materiales, como es el caso de la pintura y una muestra de ello, son estas obras plasmadas en cuevas.
Los pobladores de esta región conocen la zona donde se localizan estas pinturas rupestres con el nombre de Achichipico, figuras nítidas que muestran diferentes escenas de guerreros en una especie de ceremonia, un sitio que juega un papel muy importante en la historia del estado de Morelos, pues son obras de arte de una gran riqueza patrimonial que se deben conservar.
5. Milpa Alta, CDMX
La alcaldía Milpa Alta es una de las regiones más alejadas del centro de la ciudad, un lugar ideal para contemplar los bellos paisajes capitalinos desde alguno de sus miradores y que además es la cunda de los mejores moles de la región central del país, muy distinguida también por su producción de nopales y sus derivados.
En esta zona también se han localizado algunas pinturas rupestres en los muros de las calles comunes del pueblo Santa Ana Tlacotenco y también en las faldas del cerro de Ocotepec, pues se encontraron rocas que resguardan las únicas pinturas rupestres que existen en toda la Ciudad de México, en una zona abandonada que ha sido maltratada, en espera de que sean resguardadas por el INAH.
Si quieres conocer más destinos con pinturas rupestres, no te pierdas nuestra nota: Pinturas rupestres, el nuevo descubrimiento arqueológico en Sonora