Proclamada como la ciudad más innovadora del mundo en 2013, Medellín, la ciudad de la eterna primavera, recibe a los viajeros con sus montañas eternamente verdes. Ahí, en medio de un valle, se extiende la ciudad de color naranja que posee una gran riqueza histórica y cultural que se refleja en su gastronomía, en sus calles y tradiciones que se conservan a través del tiempo. Aquí, nació Fernando Botero, uno de los artistas plásticos más famosos quien dejó plasmada su obra en la ciudad.
Medellín es la capital de Antioquia y huele a Jazmines, a orquídeas, a hierba fresca, esta ciudad cuenta con una gran tradición cultural y artística pero también es famosa por sus cultivos de flores que se exportan a diferentes partes del mundo, Sus noches son siempre de luna y de día, los cielos son claros y tan azules como el mar. Su gastronomía es un mosaico de sabores, olores y colores, el pretexto perfecto para iniciar un viaje a través de su cocina.
Te podría interesar
Qué hacer en Medellín
Para conocer a Botero hay que ir tras sus huellas, en la ciudad está Plaza Botero es una de las más famosas de Medellín y desde hace diez años se ha convertido en un referente del arte y la cultura; está en el centro de la ciudad y fue diseñada por el mismísimo Fernando Botero quien decidió donar algunas réplicas de sus obras a esta urbe. Él ubicó en la plaza las 23 esculturas y las dos fuentes de agua que las rodean.
Las obras fueron fundidas en bronce en talleres tradicionales de Pietra Santa, Italia, donde el artista antioqueño dirige minuciosamente el proceso de producción de moldes y vaciados. Me pierdo entre guayacanes, cipreses, ceibas y, por supuesto, entre las obras del artista: Mujer Reclinada, Mujer Sentada, Hombre Vestido, Rapto de Europa, Eva, Caballo con Bridas, Maternidad- entre otras.
Te podría interesar
Aunque la plaza, ubicada en frente del Museo de Antioquia, se construyó en 1999, no fue sino hasta 2002 que se instalaron las esculturas del maestro Botero, todas exhibidas alrededor del mundo (París, Nueva York, Madrid, por nombrar algunas ciudades).La Plaza conocida también como Parque de las Esculturas, tiene una extensión de 7.500 metros cuadrados aproximadamente y está rodeada por el Palacio de la Cultura Rafael Uribe Uribe, un paso obligado para los visitantes.
Otro sitio que te lleva a conocer los pasos de Botero es el Museo de Antioquia, un espacio dedicado a la exhibición de arte prehispánico, moderno y contemporáneo, a través de una colección de más de 5 mil piezas que incluye vestigios del patrimonio arqueológico hasta arte contemporáneo. Esta edificación de 14.500 m², con influencias del Art Decó americano, cuenta con diversas obras del maestro Botero, como el cuadro “El Exvoto”, una donación que abrió el camino para realizar la plaza Botero.
A la hora de la comida hay que ir al Sector Comercial El Bosque donde se concentran los restaurantes, cafés, tiendas y bares. Se puede hacer toda una ruta gastronómica para saborear las delicias que ofrece la ciudad. Pero uno de los restaurantes de mayor tradición es "Las Cazuelas de la 80", donde se vende comida criolla, o regional. La especialidad es el atado que es una especie de tamal o mixiote envuelto en hoja de plátano, lleva arroz, frijoles, papa, zanahoria, carne de res, puerco y pollo. No se puede dejar de probar el café, la joya de la corona es el tinto, que es una especie de expreso o americano bien cargado.