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Curiosidades del Vaticano, el país más pequeño del mundo y Patrimonio de la Humanidad

El Vaticano se destaca por ser un país el cual peudes recorrer en horas y el cual tiene impresionantes obras de arte que han perdirado por siglos

Se trata de un país que puedes recorrer en solo unas horasCréditos: Shutterstock
Escrito en DESTINOS el

La Ciudad del Vaticano es el país más pequeño del mundo, una característica que fascina a los miles de visitantes que recibe año con año, pues además de ser uno de los sitios más fáciles de recorrer, cuenta con un resguardo histórico impresionante, pero sobre todo destaca por ser sede de la iglesia católica desde el siglo IV. Entre estas y otras curiosidades queremos revelarte más detalles del Vaticano para tu próxima visita a Italia. 

Aunque sea un país pequeño, comparte territorio con Italia, y se encuentra prácticamente dentro de la capital de Roma, así que sin tener que tomar un avión, hacer papeleo con el pasaporte, etc; puedes visitar el Vaticano. Descubre más de los tesoros que tiene este país, pero sobre todo la riqueza cultural que sobresale al paso del tiempo. 

1. País más pequeño del mundo 

Se trata de una superficie de apenas 44 kilómetros cuadrados y con una población de apenas más de 800 personas. Estas características hacen que sea uno de los pocos países del mundo que se pueda recorrer a pie en solo ¡una hora!, pero dentro de la ciudad de Roma. 

2. Patrimonio de la Humandiad 

Aunque es un país único designado en su totalidad como Patrimonio de la Humanidad, en 1984, se trata de uno de los sitios que incluye a la ciudad del Vaticano como los bienes extraterritoriales de Roma, la Basílica de San Pedro y Santa María la Mayor. 

3. Ciudadanía 

Aunque es un país, el Vaticano no tiene hospitales o salas de parto, lo que hace que no haya ciudadanos del Vaticano por nacimiento, más bien, la ciudadanía se concede por el nombramiento para trabajar en un determinado puesto al servicio de la Santa Sede. Aunque también se extiende a los cónyuges , los padres y otros parientes que conviven pero, una vez que el nombramiento termina, la ciudadanía también.