Hace poco más de 100 años, uno de los lugares más importantes en México y Latinoamérica religiosamente hablando se volvió noticia, pues un hombre colocó una bomba escondida entre un ramo de flores a los pies de la Virgen de Guadalupe en la antigua Basílica, su intención, destruir la imagen de ‘La Patrona de México’, sin embargo, la imagen no sufriría ningún daño, pues un héroe inesperado lo salvó. ¿Conoces la historia?
La historia del héroe de la Virgen de Guadalupe
Fue una mañana del 14 de noviembre de 1921, cuando un hombre colocó una bomba hecha con dinamita en un arreglo florar a los pies de la imagen de la Virgen de Guadalupe que en aquel momento se ubicada en la antigua Basílica. El artefacto estalló cerca de las 10:30 de la mañana, lo que provocó daños en las gradas del altar hechas de mármol y los candeleros de latón. Sin embargo, fue un Cristo Crucificado de hierro y bronce con un peso de 34 kilos fue el que salvó a la imagen de la Virgen, ya que recibió todo el impacto y cayó al piso quedando desfigurado.
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Como era de esperarse, tal suceso fue considerado como un milagro, pues además el cristal que cubre el cuadro de la Virgen no sufrió ningún daño, ni siquiera se estrelló, ni un rallón, lo que ocasionaría que posteriormente a este héroe se le llamara Santo Cristo del Atentado.
¿Dónde se encuentra el Santo Cristo del Atentado?
Si lo que deseas es conocer y ver cómo quedó aquel cristo considerado el salvador de la imagen de la Virgen de Guadalupe así como visualizar el nivel de intensidad de aquella bomba, podrás visitar al Santo Cristo del Atentado en una vitrina de la Basílica de Guadalupe. Está ubicado a la derecha de la puerta central de la Basílica, ahí puedes observar la reliquia y ver la historia completa de este suceso.
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Como dato, de acuerdo a notas de aquella época, hubo un detenido de nombre Luciano Pérez que era ferrocarrilero, los que estaban presentes aquel día buscaban linchar al culpable, pero, según cuentan fue el presidente Álvaro Obregón el que evitó el linchamiento de aquel presunto