No importa la época del año para visitar y relajarse entre aguas termales, pero en Querétaro existen unas maravillosas pozas naturales que están rodeadas por impresionantes montañas. Un paisaje que sin duda es una experiencia única, pero sobre todo, te brinda la oportunidad de disfrutar de las propiedades curativas para tu cuerpo. Aquí te diremos dónde se encuentran y cómo puedes visitar estas aguas termales entre montañas.
Los beneficios de las aguas termales se atribuyen a su composición química, que puede variar según el lugar de origen. Gracias a sus componentes te pueden ayudar a relajarte de los músculos, mejorar tu circulación sanguínea, reducir el estrés, fortalecer el sistema inmunológico, así como mejorar la salud de tu piel. Algunas personas recomiendan las aguas termales para tratar enfermedades o condiciones como artritis, dolor de espalda, problemas respiratorios, entre otros.
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¿Dónde están las aguas termales entre montañas en Querétaro?
Las aguas termales escondidas entre montañas se localizan en Xhidí, cerca del Pueblo Mágico de Cadereyta de Montes, en Querétaro. Este destino es de los más populares para aquellas personas que quieran explorar la naturaleza, disfrutar de un paisaje diferente y entre aguas cristalinas. Dentro de la comunidad de Xhidí se encuentra el manantial El Aguacate, el cual es un sitio virgen que permite total conexión con la naturaleza y que contrasta con las aguas cristalinas de las aguas termales.
Para poder llegar a ellas debes hacer un camino a pie entre las montañas, pro aproximadamente 30 minutos, lo que significa que no pueden ingresar vehículos. Las hermosas aguas termales se ubican a 241 kilómetros de la CDMX, así que implica un viaje de 3 horas y 30 minutos en auto por la carretera México San Luis Potosí, la Autopista Querétaro México y tramos de las rutas 120 y 126.
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Podrás disfrutar de un camino entre matorrales, cactáceas, biznagas gigantes, garambullos, mezquites, así como cactus enanos. Aprecia el camino solitario y silencioso entre las paredes rocosas que te maravillan al contrastar con el intenso azul del cielo.