Estamos ya en Verano, la temporada más calurosa del año pero también cuando inician las lluvias y ciclones en el territorio nacional, razón por la cual el clima ha estado muy variado estos días, pero algo que nunca “pasará de moda” para escaparnos un fin de semana, son las aguas termales, y si vives en la Ciudad de México o la zona metropolitana, te contaremos de un río con una agradable temperatura considerado como un destino virgen.
Se trata de un río que se alimenta de manantiales cristalinos y termales que te encantará disfrutar por la calidez del agua que emana de ellos y va a dar al afluente, que por cierto es de poca profundidad por lo que es muy seguro para ir con toda la familia, o si no dominas la natación, puedes ir sin preocuparte por ello.
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¿Dónde están el río y los manantiales de aguas termales?
En los límites comprendidos entre los estados de Morelos y Guerrero se “oculta” el Río Agua Salada, el cual forma parte de la Reserva de la Biósfera Sierra de Huautla, en Morelos. Para llegar, desde Puente de Ixtla, Morelos, son 7.6 kilómetros hacia el sur, pero también puedes llegar por la autopista del Sol, saliendo por la caseta de Alpuyeca para incorporarte al tramo Chilpancingo-Cuernavaca y retornar una vez que pases el pueblo de Coaxitlán para tomar un camino rural que te conducirá a Agua Salada.
Atractivos que rodean al Río Agua Salada
Entre la frondosa y refrescante vegetación que caracteriza al estado de Morelos, te puedes sumergir en este río termal que a lo largo de su cauce tiene otros manantiales que se forman a través de la sierra, entre ellos, el de la Poza Azul, que es de agua salada y mineralizada. Mientras te relajas en estos manantiales, podrás observar a los coloridos peces que abundan en estos cuerpos de agua. En lo que “haces hambre” y te secas después de nadar, se puede hacer senderismo por la reserva natural.