Imagina caminar tranquilamente por tu vecindario y encontrarte, en medio de un parque, con un volcán. Ahora, imagina que ese volcán es el más pequeño del mundo, con apenas 13 metros de altura y un cráter de 8 metros de diámetro en su parte más angosta. Esto es parte de la vida cotidiana para los habitantes de Puebla que residen cerca de Cuexcomate, conocido como el volcán más pequeño del mundo. Aunque en realidad se trata de un géiser inactivo, sigue siendo fascinante que algo así exista en medio de una ciudad.
Si te lo estás preguntando, ¡sí! Puedes visitarlo. No solo eso, también es posible ingresar en su interior. Cuexcomate está ubicado en el Zócalo de la Junta Auxiliar La Libertad, en Puebla de Zaragoza, y la entrada tiene un costo de tan solo 15 pesos. Podrás descender al interior a través de una estructura de escaleras metálicas, adentrándote en un paisaje que te hará sentir como si te dirigieras al centro de la Tierra.
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¿Qué hay dentro del Cuexcomate?
Conocido como el volcán más pequeño del mundo, el Cuexcomate es, en realidad, un géiser inactivo al que los locales llaman "el hijo pequeño del Popocatépetl", debido a su conexión subterránea con este imponente y querido volcán. En su interior encontrarás un yacimiento de agua que es testimonio de su formación, originada por el brote de agua sulfhídrica y lava volcánica.
Hoy en día, aún es posible admirar el agua en su interior. Más allá de la emoción de sentir que estás ingresando a un volcán (incluso en Google Maps lo encontrarás bajo el nombre de Volcán Cuexcomate), el verdadero atractivo está en los destellos y colores que se forman por los reflejos del agua cristalina sobre las piedras. Un espectáculo visual que resulta verdaderamente impresionante.
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¿Sabías que, además de sentir que viajas al centro de la Tierra, observar un espectáculo agua subterránea y admirar las paredes internas del Cuexcomate, existe un rincón especial conocido como “el corazón del Cuexcomate”, donde tus sueños pueden hacerse realidad? Así es. Dentro del géiser, al llegar a la zona más baja accesible, hay un pequeño nicho en la que apenas cabe una mano. La leyenda dice que, si introduces tu mano y te cae una gota de agua, tu deseo se cumplirá.
¿Cómo llegar desde la CDMX?
Si deseas visitar este increíble lugar desde la CDMX, el trayecto en auto dura aproximadamente 1 hora y 50 minutos. También puedes optar por tomar un autobús a la terminal CAPU de Puebla. Una vez allí, aborda un autobús urbano en dirección al Boulevard Esteban de Antuñano. Aproximadamente 13 minutos después, baja en la parada del Ayuntamiento 2 Oriente. El trayecto total te tomará cerca de 2 horas y media.