Un verdadero paraíso escondido en la selva de Chiapas, deslumbra a los aventureros que se sumergen en este destino poco conocido que se mantiene semivirgen y es una verdadera joya natural que es fiel ejemplo de las bellezas naturales que existen dentro de México, y más concretamente en el estado de Chiapas, al sureste del país.
Estas increíbles caídas de agua son un increíble oasis refrescante al que puedes acudir en esta temporada en que se han registrado altas temperaturas en todo el territorio mexicano, por otra parte, este sitio es perfecto para disfrutar de las próximas vacaciones de verano que están a la vuelta de la esquina, aquí podrás ser testigo de un espectáculo natural y un chapuzón refrescante al mismo tiempo.
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Tres Tzimoleras, el oasis poco conocido para disfrutar en el verano
Este increíble paraje natural y refrescante se encuentra muy cerca del rancho Santo Domingo, está compuesto por tres caídas de agua, la más alta de ellas de 60 m de altura, que alimentan increíble esposas naturales donde los turistas se sumergen en las increíbles aguas cristalinas y frescas que recorren este oasis natural, donde el estrés y la rutina se quedan en el pasado.
Este destino de ubica en el pueblo de Tzimol, un valle rodeado de vegetación increíble, además de bellos cañaverales que ven hacer el río San Vicente, mismo que alimenta las Tres Tzimoleras y permite que las pozas naturales se conviertan en increíbles albercas donde los visitantes pueden nadar y sumergirse en este destino lleno de magia y belleza a los pies de estas tres cascadas.
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Por si esto fuera poco, el paraje natural que envuelve a las Tres Tzimoleras es perfecto para realizar diversas actividades del turismo de aventura, rapel, senderismo a través de las montañas y las grutas que se forman en el paso del agua, snorkel, buceo, recorridos por las cascadas y puentes colgantes colocados estratégicamente.
La cascada Tres Tzimoleras es un espectáculo natural poco conocido en donde se organizan diversos tours que te llevan a recorrer este paisaje de manera increíble, en donde muchos lugares se mantienen semivírgenes, gracias a que se encuentra enclavado en la comunidad de Tzimol, en Chiapas.