Si durante esta temporada buscas costas tranquilas, aguas limpias y un ritmo más lento que te aleje del agite cotidiano, Puerto Vallarta puede ser justo lo que necesitás. Este lugar en la costa del Pacífico de México ofrece mucho más que descanso: mezcla el clima cálido con vegetación tropical y el movimiento típico de una ciudad costera.
Recorrer su paseo marítimo, probar comida del mar frente al horizonte o simplemente tumbarse a escuchar el sonido del agua son parte de su atractivo. Y si te gusta más lo natural y menos lo urbano, hay playas para todos, desde zonas remotas hasta otras con servicios, deportes y propuestas al aire libre.
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La ubicación también suma puntos. Entre la Bahía de Banderas y la Sierra Madre Occidental, hay sectores a los que solo se llega caminando o en lancha, lo que los hace únicos y poco frecuentados. Muchas de estas orillas siguen siendo vírgenes, alejadas de las multitudes.
El mar en esta época es perfecto para nadar, bucear o dejarse llevar con tranquilidad. Además, aunque el ambiente es relajado, nunca falta qué hacer: hay caminatas, excursiones a ríos, recorridos en canoa y celebraciones ocultas en playas escondidas entre árboles.
Tesoros escondidos para un verano inolvidable
Algunas playas de Puerto Vallarta parecen salidas de una postal. Aquí, el agua clara y la vegetación exuberante conviven en perfecta armonía.
- Colomitos: Este rincón costero es considerado el más diminuto del país y se encuentra escondido entre la vegetación. Solo es posible acceder a él mediante un paseo en bote o a través de una vereda entre árboles. Su entorno es reservado, el mar luce tonos verdosos intensos y las olas son tranquilas, lo que lo convierte en un sitio perfecto para flotar y refrescarse.
- Majahuitas: Perfecta para quienes desean desconectarse del ruido. Está envuelta por naturaleza salvaje y únicamente se llega navegando. Las condiciones del agua la hacen ideal para sumergirse con visor y explorar peces multicolores en su entorno marino.
- Playa Caballo: Esta zona apartada del bullicio urbano invita al descanso total. Es un lugar para disfrutar del calor del día acostado sobre la arena o dar paseos largos sin interrupciones, sintiendo la brisa marina y el sonido del agua.
Las favoritas cerca de la ciudad
Otras opciones están más cerca del centro y ofrecen servicios sin perder el encanto natural.
- Conchas Chinas: Ubicada a solo unos minutos del corazón de la ciudad, esta costa ofrece piscinas naturales formadas entre piedras y un mar de tonalidad clara. Cuenta con la distinción Blue Flag, lo que implica que no se permiten actividades motorizadas, conservando así un entorno apacible y libre de contaminación.
- Los Muertos: Para quienes disfrutan del movimiento y las comodidades, este tramo de arena en la llamada Zona Romántica es una excelente elección. Allí encontrarás tumbonas, bares, locales gastronómicos y un embarcadero muy fotografiado desde donde se aprecia uno de los crepúsculos más llamativos del litoral occidental.
Playas con aventura y sabor local
Para quienes quieren combinar naturaleza con experiencias únicas, algunas playas ofrecen más que sol.
- Mismaloya: Este sitio fue escenario de la película “La noche de la iguana”. Está inmerso entre montes verdes y vegetación abundante, con comedores informales y variadas opciones para practicar actividades acuáticas.
- Yelapa: Es una aldea costera con estilo relajado y artístico, accesible únicamente por bote. Se destaca por sus caídas de agua, senderos de piedra y un ambiente sereno.
Puerto Vallarta no es solo un destino, es una colección de experiencias entre la tierra, el mar y el cielo. Cada playa tiene su encanto y este verano es la excusa perfecta para descubrirlas.