Estamos a escasos días de celebrar la Navidad y con esto, los fieles creyentes del catolicismo también celebran el nacimiento del niño Dios, por lo que los lugares significativos de su historia o de esta misma religión, como Belén o Roma, reciben a numerosos turistas que quieren presenciar parte de esta historia.
Uno de los lugares más visitado es aquel en donde se encuentra la cuna donde nació el niño Dios. De acuerdo con lo que se menciona en la Biblia Sagrada del catolicismo, el niño Jesús nació en un pesebre que encontraron María y José en la ciudad de Belén, rodeados de animales de ganado y lejos de los lujos.
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Sin embargo, la cuna no se encuentra en Belén como se hubiera pensado, sino que la sagrada cuna del niño Jesús se conserva en una reliquia que se resguarda en el interior de la Basílica Santa María la Mayor, según lo reporta el portal especialista en la religión católica ‘Aci Prensa’.
La cuna sagrada donde nació en niño Dios
La cuna sagrada en la que nació el niño Dios se ha convertido en un objeto de oración y devoción para los fieles creyentes, al igual que la manta sagrada en la que se envolvió una vez que se falleció o como la cueva en la que se resguardó su cuerpo sin vida.
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Los sacerdotes, cardenales y expertos en el tema la llaman como ‘cunabulum’ y, básicamente, se trata de los restos de la cuna que María y José improvisaron en el pesebre donde se resguardaron para la noche del alumbramiento. Y, debido a esto, el recinto donde se resguarda recibió el nombre de Santa María adpraesepem, que en latín significa “pesebre”.
Sin embargo, no es lo único sagrado que se resguarda en este lugar religioso, sino que también se conserva un trozo de tela que, de acuerdo con lo que se reporta, es una de las tiras de tela con las que María envolvió al Niño Jesús al momento de su nacimiento. Este es del tamaño de una mano y se cree que había sido guardado en un estuche donado por Pío IX.