'La Gioconda', popularmente conocida como "Mona Lisa", es una de las obras mundialmente conocidas del pintor Leonardo Da Vinci, misma que se encuentra rodeada de misterios y una que otra leyenda que desde su creación se ha mantenido vigente. Se trata de una de las obras de arte con mayor atracción en el Museo del Louvre, pero al mismo tiempo la convierte en el blanco perfecto para diversos ataques.
Este fin de semana los ojos del mundo se concentraron en la ciudad de París, ya que esta fue el escenario para la final de la Champions en la que se enfrentarían los equipos de Liverpool VS Real Madrid, -siendo este último en alzarse como el Rey de Europa-, sin embargo, el fin de semana estuvo lleno de disturbios previos al encuentro; aficionados entrando al estadio Stade de Francé sin boleto, ocasionaron el retraso en el inicio del juego, pero tal parece que los disturbios no solo se concentraron en el estadio de futbol.
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Aprovechando la emoción que se vivía en la ciudad parisina, el Museo de Louvre acaparó las miradas del mundo, ya que un visitante fingió necesitar de la ayuda de una silla de ruedas para entrar al lugar y aprovechar los espacios preferenciales para tener una mejor vista de las obras que ahí se exhiben. Una vez delante del famoso cuadro de 'La Gioconda', el joven aprovechando su cercanía al cuadro, se levantó de su silla y le lanzó un pastel. Los guardias del lugar se apresuraron a sacarlo del recinto y a limpiar los daños.
De pasteles hasta ácido, los ataques a la 'Mona Lisa' de Da Vinci
De acuerdo con la información dada a conocer, el hombre disfrazado con una peluca, logró entrar a las instalaciones del Louvre fingiendo que requería una silla de ruedas, por lo que se le permitió el paso a una zona exclusiva para personas con movilidad reducida. Una vez frente al cuadro de La Gioconda, se puso de pie y lanzó un pastel frente al asombro de todos los visitantes, para después lanzar flores a los asistentes, por lo que hay quienes aseguran que se trató de un performance.
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Por fortuna, la obra no sufrió daños ya que se encuentra protegida por un cristal. Ante la mirada de los asistentes, la seguridad del lugar detuvo al hombre para después comenzar a limpiar el vidrio con ayuda de algunas hojas de papel. Las imágenes del ataque le han dado la vuelta al mundo, e incluso en redes circula un video del atacante justo cuando es detenido y trasladado por las autoridades del lugar.
Aunque no sería la primera vez que la obra es blanco de ataques.
Marcel Duchamp, una obra convertida en provocación
En 1919, Marcel Duchamp, considerado como el padre del arte conceptual, "atacó" la obra de Leonardo Da Vinci, cuando dibujó sobre una postal con la imagen de la 'Mona Lisa' un bigote y barba, al mismo tiempo que la calificó como una "obra de arte". Además colocó la leyenda "L.H.O.O.Q" en la parte baja de la imagen, la cual hace alusión a una broma obscena en francés si se lee letra por letra. La modificación a la imagen pronto se volvió popular, por lo que se hicieron algunas copias en diferentes tamaños y colores.
El robo de La Gioconda
Un par de años antes, en 1911, el Museo de Louvre le dio la vuelta al mundo ya que la famosa obra de Da Vinci desapareció del lugar en el que se estaba exhibida y pasó a considerarse como 'el robo de arte más famoso de la historia'. La curiosidad sobre el cuadro desaparecido atrajo la atención de cientos de turistas que asistían al lugar para ver solo el lugar vacío. Por dos años, no se supo nada del paradero del cuadro, hasta que Vincenzo Peruggia, un extrabajador del museo intentó vender la obra.
Peruggia fue detenido y la obra regresó sin daño alguno, pero una vez más se intentó sustraer durante la Segunda Guerra Mundial, por lo que tuvo que ser retirada del museo y llevada a diversos sitios de forma secreta, a fin de protegerla de las manos nazis, hasta que finalmente pudo regresar a su lugar de origen para seguir en el ojo público.
Dos ataques en un mismo año
Se estima que La Gioconda de Leonardo Da Vinci, fue pintada en los primeros años del siglo XVI, aunque a la fecha no se ha podido determinar con exactitud la fecha de creación de la obra más famosa del mundo. Sin embargo, desde su creación los ataques y las historias que la rodean no han dejado de parar y de acrecentar las leyendas que rodean al cuadro. Tal es el caso de los dos ataques sufridos en un mismo año.
En 1956, la Mona Lisa volvió a acaparar la atención del mundo, pero en esta ocasión debido a los dos ataques sufridos en ese mismo año, el primero de ellos cuando la obra fue rociada con ácido provocando daños menores en la parte inferior del cuadro. Y un tiempo después, la pintura fue atacada de nueva cuenta cuando le lanzaron una piedra, la cual logró traspasar el vidrio que la protegía y desprender parte de la capa pictórica a la altura de su codo izquierdo, siendo quizá de los daños que más huellas dejaron en la pintura.
Vidrio a prueba de balas, pero no de pintura
Tras los diversos ataques de los que la obra había sido víctima, el Museo tomó medidas más extremas para proteger una de sus más preciadas obras, por lo que optaron por usar un vidrio protector a prueba de balas, pero lo que el personal del recinto no logró prevenir fue un nuevo ataque, pero quizá un menos agresivo que las balas: pintura. En 1974, la pintura de Da Vinci de nuevo fue blanco de ataques al lanzarle pintura roja como medida de protesta contra las nuevas políticas del museo que complicaba el acceso a personas con discapacidad.
Una taza y un pastel, los últimos ataques
Después de largos años en calma y aparentemente de un cese de ataques, La Gioconda de nueva cuenta fue el blanco para nuevas protestas. En 2009, las noticias volvieron a darle la vuelta al mundo cuando el cuadro fue atacado con una taza de cerámica recién comprada en la zona de recuerdos del museo, ya que una mujer rusa señaló su inconformidad contra el gobierno después de que se le negara la ciudadanía francesa, sin embargo, en esta ocasión la obra no sufrió daño alguno.
Y finalmente este fin de semana, cuando un joven decidió lanzarle un pastel al vidrio que protegía la obra, aprovechando su "discapacidad" para obtener un acceso preferencial a la obra, para después lanzar flores a los asistentes, por que lo aún no se descarta que se trate de un performance, aunque hasta la fecha se no han dado a conocer los detalles sobre cuál fue el motivo que orilló al hombre a realizar este ataque.