Entre los destinos que recorrerá próximamente el Tren Maya por la ruta del sureste mexicano está Yucatán, estado de la República Mexicana con una variedad de encantos naturales como playas, zonas arqueológicas, Pueblos Mágicos y con Encanto y por supuesto, sus encantadores cenotes.
Los cenotes son una especie de piscinas naturales subterráneas que se formaron por las condiciones que ocasionó en esa región el impacto del meteorito que hace más de 60 millones de años extinguió a los dinosaurios, pues favoreció a que la roca se disolviera poco a poco y quedaran los ríos bajo la corteza terrestre. Si bien son un paraíso para nadar entre la naturaleza, hay algunos en los que no se permite ingresar para nadar.
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¿Cuál es la razón por la que está prohibido nadar en estos cenotes?
Si no has viajado por el sureste o la Península de Yucatán, pensarás que se puede ingresar a los cientos de cenotes que están a lo largo de toda esta ruta, y a los que se han sumado los recién descubiertos con la obra del Tren Maya, sin embargo, hay algunos que están en propiedad privada, como en los patios de las casas a los que no hay ingreso al público.
Pero hay otros que en su momento fueron majestuosas cavernas acuáticas con acceso al público y el turismo, y que actualmente está prohibido meterse a nadar; entre esos están Xcalah en la zona arqueológica de Dzibilchaltún y el de la comisaría de San Mateo, que en años recientes tuvieron que ser cerrados debido a la contaminación por el turismo desmedido -en el primero- y por casos de enfermedad provocados por el excremento de murcielago, en el de San Mateo.