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Viajar en avión, ¿de pie? Conoce las propuestas para ahorrar en tus vuelos

Los vuelos low-cost van ganando terreno entre las preferencias de los viajeros, pero, ¿hasta dónde se puede sacrificar la comodidad?

Asientos.La principal modificación se propone en esta secciónCréditos: Pixabay/nickzigic
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La tendencia para los viajes en avión va hacia el low-cost, pues entre más económico, hay más oportunidad de conocer el mundo. Desde menos equipaje, ausencia de alimentos y hasta espacios reducidos, es parte de lo que actualmente podemos ver en los vuelos comerciales a bajo costo, pero, ¿qué otras opciones se están planeando para reducir aún más los costos? Aquí te lo contamos.

La pandemia por Covid-19 fue un parteaguas para la industria del turismo a nivel mundial, y en el proceso de la recuperación en las aerolíneas, se buscan alternativas para facilitar -y poner al alcance- de la población viajar a sus destinos favoritos o para explorar nuevos lugares. Podemos ver que los espacios entre los asientos de los aviones son más reducidos y así tener más pasajeros a bordo; sí, es menos comodidad a cambio de un precio más accesible.

Viajar 'casi' de pie

La empresa italiana Avioninteriors, especializada en la fabricación de asientos de avión, tiene como propuesta algo más parecido a un asiento para bicicleta pero con respaldo, por lo que viajarías casi de pie sin ocupar el espacio que comúnmente se usa para estirar las piernas. Esta alternativa representa un 20 por ciento más de pasajeros y además, este modelo y material pesa tan solo la mitad de uno convencional. Claro, apenas es un prototipo pero no dudes que en un futuro llegues a viajar en un avión con este tipo de asientos.

Doble fila de asientos

Un diseñador español, llamado Alejandro Núñez, cuya propuesta fue de las semifinalistas en los Crystal Cabin Awards en 2021, ha ideado un prototipo en el cual se retira la parte de los compartimentos superiores donde se coloca el equipaje de mano y en su lugar poner otra fila de asientos superiores, y para reducir el peso, se plantea eliminar ese material acojinado de los lugares y solamente contar con otro que se tensa, muy parecido al de las sillas plegables. Con esta modificación los asientos pesarían por mucho ocho kilos.