Hoy, 19 de septiembre se recuerdan los sismos de 1985 y 2017; el primero, con una magnitud de 8.1 grados, y el segundo, de 7.1 grados. Ambos representaron un desastre natural en la Ciudad de México, y claro, en los sitios de sus respectivos epicentros; el de 1985 en las costas de Michoacán y el de hace cuatro años, en Puebla.
Fue a partir del terremoto de 1985 que se creó el Sistema Nacional de Protección Civil, para plantear protocolos de seguridad y atender emergencias naturales; una de las tareas de este sistema es la coordinación del Simulacro Nacional que se lleva a cabo cada 19 de septiembre en México, ya que, si bien los sismos no son predecibles, tampoco se asegura que no ocurrirán.
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Esto se debe a que la República Mexicana está sobre cinco placas tectónicas; y si te preguntas qué son, se trata de fragmentos de la litósfera, es decir, la capa superficial de la Tierra y que están en constante movimiento por lo que liberan grandes cantidades de energía y ondas sísmicas al chocar entre sí, y dependiendo el epicentro de dicho choque y la magnitud, son los alcances y daños.
¿Cuáles son las cinco placas sobre las que está México?
De acuerdo a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), las cinco placas sobre las cuales está la República Mexicana y que al moverse como “un rompecabezas móvil”, generan fuerza de fricción, y si esta es mayor a la resistencia de las placas, la corteza de la Tierra se rompe; y es cuando ocurren los terremotos. Estas son las cinco placas tectónicas:
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- Placa de Norteamérica
- Placa de la Rivera
- Placa del Pacífico
- Placa de Cocos
- Placa del Caribe
¿Por qué se perciben más fuertes los sismos en algunas zonas de la CDM?
Teniendo como referencia los terremotos de 1985 y del 2017, especialistas de los institutos de Geofísica y de Ingeniería de la UNAM, aclaran que la magnitud con la que se perciben los temblores en la capital del país depende en gran medida porque la mayor parte de este territorio fueron lagos en el Valle de México, y las actuales construcciones están sobre sedimentos blandos.
Por lo anterior, las ondas sísmicas tienen una amplificación que podría ser la más grande reportada a nivel mundial; en el mismo estudio publicado por la “Máxima Casa de Estudios”, indica que la amplitud de dichas ondas podría ser 50 veces mayor en colonias como Doctores, Centro, Condesa y Roma -que están sobre una zona blanda- a las que están en suelo firme de la capital del país.