DESTINO MONTAÑOSO

Cumbres de Monterrey: explorando la Sierra Madre Oriental en Nuevo León

Un paraíso escondido en Nuevo León deslumbra con montañas, ríos y cielos estrellados; el Parque Nacional Cumbres de Monterrey sorprende a locales y visitantes.

Destino montañoso.Cumbres de MonterreyCréditos: Web: gob.mx
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Entre sierras monumentales y cañones que parecen no tener fin, el Parque Nacional Cumbres de Monterrey destaca como uno de los lugares más impresionantes del noreste de México. Este espacio protegido funciona no solo como un enorme respiro natural para la región, sino también como un refugio para quienes desean dejar atrás el ruido urbano y conectar de nuevo con la vida silvestre.

En pleno corazón de la Sierra Madre Oriental, esta reserva se expande por más de 240 mil hectáreas, lo que la convierte en una de las áreas naturales más extensas del país. Su atractivo no se mide únicamente en tamaño, sino también en variedad: allí se mezclan bosques de pino y encino con profundos cañones, cascadas imponentes y paredes rocosas que parecen acariciar las nubes.

La proximidad con Monterrey le otorga un carácter especial. A solo unos minutos de la gran ciudad, se abre un entorno completamente distinto, con corrientes de agua limpias, oxígeno fresco y panorámicas dignas de una postal. Esta cercanía lo transforma en un sitio perfecto para la aventura sin necesidad de alejarse demasiado de la vida metropolitana.

Por otra parte, la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio) ha reconocido la zona como prioritaria para la conservación terrestre, gracias a su relevancia ecológica y la riqueza de fauna que protege. Animales como el oso negro, el puma, el venado cola blanca e incluso la mariposa monarca tienen aquí un hábitat seguro donde sobrevivir y reproducirse.

Un tesoro natural de Nuevo León

El Parque Nacional Cumbres de Monterrey comprende algunos de los lugares más emblemáticos del estado, como el Cerro de la Silla, la Huasteca, la Estanzuela, Chipinque y la famosa Cascada Cola de Caballo. Cada rincón ofrece una experiencia distinta: desde rutas de senderismo para principiantes hasta cañonismo extremo en el Cañón de Matacanes o escalada en roca en La Huasteca.

Su riqueza natural también se refleja en el cielo. Lejos de la contaminación lumínica, en sitios como la Ciénega de González es posible observar noches plagadas de estrellas, ideales para los amantes de la astronomía y la fotografía nocturna.

Flora, fauna y agua para Monterrey

El parque no solo es un atractivo turístico, también cumple un papel vital para la vida cotidiana de la región. Produce alrededor del 70 % del agua que abastece a la ciudad de Monterrey, una de las urbes más pobladas de México.

En cuanto a biodiversidad, se han registrado más de 1,300 especies de flora y fauna, con al menos 73 catalogadas en alguna categoría de protección. Entre ellas destacan aves como la cotorra serrana oriental, el halcón peregrino y el carpintero arlequín.

Fauna y agua para Monterrey. Fuente: Web: gob.mx

Aventura y conservación en equilibrio

El turismo en Cumbres de Monterrey va de la mano con la conservación. Hay zonas de campismo y cabañas que permiten pernoctar en contacto con la naturaleza, siempre bajo reglas claras para evitar daños al ecosistema. La recomendación principal para los visitantes es respetar los senderos, no dejar basura y planificar sus recorridos en temporadas seguras.

La historia también respalda su importancia, fue decretado parque nacional en 1939 y reafirmado como Área Natural Protegida en el año 2000, garantizando así la preservación de este territorio para las generaciones futuras.

Hoy, el Parque Nacional Cumbres de Monterrey se erige como un símbolo de orgullo para Nuevo León. Un destino donde las montañas se mezclan con ríos, bosques y cielos estrellados, invitando a explorar, contemplar y valorar la grandeza natural de México.