Hacer un viaje en el tiempo resulta una posibilidad muy remota incluso con los avances tecnológicos actuales. Sin embargo, para conocer algunos elementos indispensables que marcaron la historia de nuestra nación, podemos adentrarnos en sus zonas arqueológicas más destacadas, donde conoceremos algunos aspectos fascinantes sobre las culturas que habitaron esta nación desde tiempos ancestrales.
Los amantes de la historia disfrutarán hacer este viaje al pasado al conocer la zona arqueológica más antigua de México y los misterios que resguarda este espacio, así que empaca las maletas y vamos a disfrutar una nueva aventura entre escenarios singulares con una riqueza cultural única que marcó el rumbo del país y ahora es conocida como un Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
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¿Cuál es la zona arqueológica más antigua de México?
A pesar de que Chichén Itzá o Teotihuacán son unos de los vestigios arqueológicos más visitados de nuestro país por ser dos ciudades ancestrales que albergaron importantes culturas antiguas que habitaron en este territorio. Sin embargo, estos espacios corresponden a un periodo más recientlo que creemos, considerando que se deben tener en cuenta miles y miles de años de historia antes de ellas, lo cual convierte a México en una nación fascinante para los amantes del turismo cultura.
Para conocer los vestigios más antiguos de esta nación debes hacer un viaje al norte del territorio nacional, específicamente al estado de Nuevo León, donde se encuentra la llamada zona arqueológica La Morita II, que ha sido objeto de diferentes investigaciones arqueológicas para catalogarla como el yacimiento más antiguo de esta nación, debido a todo lo que se ha encontrado aquí.
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El sitio se encuentra ubicado dentro de una cueva en la zona de la sierra y los expertos del instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) han realizado varios estudios y excavaciones para descubrir algunos secretos importantes que se resguardan en estos rincones, los cuales datan de miles de años antes de Cristo, muchos siglos antes de que Tenochtitlán se convirtiera en la ciudad prehispánica más importante de la historia.
Dentro de estas misteriosas cuevas se pueden encontrar algunas pinturas rupestres muy rudimentarias y elementales, las cuales se consideran como los primeros rastros de arte prehispánico localizados en la República Mexicana, una belleza singular que puedes explorar en tus próximas rutas hacia este destino del norte del país que te espera con muchos sitios más por conocer en este territorio.
Pero eso no es todo, pues además de las pinturas rupestres que se encontraron en La Morita II fueron algunos fósiles, pues los expertos hallaron huesos de seres humanos de un bebé y un adolescente, esqueletos que cuentan con aproximadamente 2 mil 500 o 3 mil años de edad. De acuerdo con los especialistas, es probable que estos restos correspondar a un enterramiento ritual e incluso descubrieron un pedazo de madera que tiene aproximadamente 14 mil años.