México está lleno de destinos únicos en el mundo, y si te gustan los datos curiosos, aquí tienes uno: el país alberga el único géiser marino de todo el continente americano. Un géiser marino o marítimo es un fenómeno natural en el que el agua pulverizada se proyecta al aire debido al movimiento de los flujos.
Si alguna vez has visto la clásica imagen del agua proyectada por las ballenas, imagina algo similar, pero que ocurre desde dentro del mar. Ese es el caso de La Bufadora, que aunque no cumple al pie de la letra con la definición de géiser, es considerado el único de su tipo en América. Se trata de una chimenea natural abierta por la que, cuando el mar choca contra el acantilado, el agua sube a través de ella y forma un chorro de espuma pulverizada, creando un espectáculo natural maravilloso que atrae a turistas y amantes de la naturaleza. ¿Sabes dónde encoentrarla?
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La Bufadora: Un espectáculo natural en Baja California
La Bufadora está ubicada en Baja California, a 35 kilómetros del centro de Ensenada, en un lugar conocido como Punta Banda. Es famosa por la impresionante altura del chorro de agua que se proyecta a través de la chimenea natural, alcanzando hasta 30 metros sobre el nivel del mar, lo que la convierte en uno de los bufaderos más altos del mundo.
¿Te dieron ganas de conocerlo? ¡Buenas noticias! Las vacaciones de invierno están por llegar, y esta es justamente la mejor época del año para disfrutar de este fenómeno, ya que durante el invierno los chorros alcanzan mayor altura debido a las mareas altas. Es un espectáculo natural imperdible.
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No es casualidad que se compare este fenómeno natural con el “chorro de agua” que expulsan las ballenas. Sin embargo, las ballenas no lanzan agua; en realidad, expulsan aire a través de un orificio en la parte superior de su cabeza llamado espiráculo. Al subir a la superficie, liberan el aire de sus pulmones a través de este orificio, y cuando el aire caliente entra en contacto con el frío ambiente, se condensa formando una columna de vapor de agua que parece un chorro de agua.
A pesar de esta explicación científica, existe una leyenda local que habla de una ballena bebé que se perdió durante la migración de su especie, la ballena gris, y quedó varada en la zona. Según la leyenda, la ballena lanzaba el chorro de agua para señalar su posición, pero nunca fue encontrada. Su cuerpo se transformó en roca, y se dice que seguirá lanzando chorros eternamente, esperando ser rescatada.