DESTINOS NATURALES

El impresionante ahuehuete 'milagroso' rodeado de pozas naturales con aguas cristalinas

El agua natural de las pozas milagrosas de Chalma cruza por un centenario ahuehuete, el cual forma parte del Registro Nacional de Árboles Majestuosos de México

Destinos únicos.Disfruta de este recintoCréditos: Pexels
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La Semana Santa está próxima y en este período, las familias mexicanas acostumbran a visitar algunos santuarios religiosos para conmemorar la Pasión de Cristo, uno de los recintos más visitados es la del Señor de Chalma que se encuentra en el Estado de México. Pero en este punto también se encuentran unas pozas milagrosas que son sumamente populares entre los visitantes y aquí te contamos cuánto cuesta meterse en ellas.

El poblado de Chalma forma parte del municipio de Ocuilan y cuenta con una gran popularidad entre la comunidad católica, por lo que cada día recibe la visita de miles y miles de peregrinos provenientes de diferentes partes de México. Incluso, durante los fines de semana es posible ver que la cantidad de visitantes aumenta en gran medida, pues los caminos para llegar a la iglesia se llenan de personas.

Las pozas naturales del Ahuehuete de Chalma

Antes de llegar al Santuario del Señor de Chalma, los visitantes se encuentran con una joya natural que es suma importancia para el lugar, se trata del Ahuehuete de Chalma que está rodeado de numerosas pozas que se forman por el caudal proveniente del cerro de las Lagunas de Zempoala.

El agua del arroyo ahora circula por entre las pozas que se construyeron en 1997, dado que ahora los turistas se dan cita en este lugar porque se cree que estas son milagrosas. La tradición es que antes de llegar al santuario del Señor de Chalma, se debe meter a las pozas para limpiar el cuerpo y alma, es decir, quitarse los pecados.

La historia del lugar dice que hace cientos de años dos frailes de la Orden de San Agustín, Sebastián de Tolentino y Nicolás de Perea, llegaron a Chalma como parte de su proceso de evangelización y en los cerros de este poblado encontraron cuevas en las que se veneraba a Oxtotéotl, Dios de la Cueva, con sacrificios humanos.

Sin embargo, antes de llegar a las cuevas del Dios de la Cueva, se metieron a bañar en el caudal del Ahuehuete para ducharse y descansar, pues al día siguiente retomarían su camino para subir al cerro y derribar las cuevas. Pero a su llegada, se percataron de una cruza de madera con un Jesucristo que estaba sobre la imagen de Oxtotéotl destruida, lo que consideraron un milagro. Así, los baños en el Ahuehuete se han convertido en una tradición para presentarse en el Santuario del Señor de Chalma.