Viajar no es un gasto, sino una inversión en experiencias enriquecedoras, desarrollo de habilidades y crecimiento personal. Los amantes de los viajes comprendemos que, en muchas ocasiones, preferimos destinar nuestro dinero a explorar el mundo en lugar de, por ejemplo, comprar un nuevo televisor.
Existe una idea errónea de que viajar es un lujo reservado únicamente para aquellos con grandes fortunas. Si bien es cierto que los viajes requieren cierto desembolso económico, también es verdad que existen numerosas formas de reducir los costos y hacerlos más accesibles para todos.
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Consejos para ahorrar durante tus viajes: Cosas que debes evitar
No prepararte antes de viajar
Viajar de forma espontánea puede ser emocionante, pero suele ser más recomendable para viajes cortos. Para viajes de más de 4 días, es prudente planificar y tener claros los gastos principales con anticipación. No reservar los boletos de transporte (avión, barco, autobús, tren, etc), alojamientos y actividades con reserva anticipada puede resultar más costoso a largo plazo. Además también podrás evitar gastos innecesarios si sabes que tipo de vestimentas y objetos debes llevar.
Elegir el hospedaje sin comparar precios
Este apartado aborda dos consejos importantes. En primer lugar, siempre es recomendable verificar con anticipación cuál es la mejor manera de cambiar tu dinero a la moneda local (si se trata de un viaje internacional) y si existen descuentos por pagos en efectivo en tus hospedajes. Además, reserva con anticipación si es posible y considera diferentes opciones que se ajusten a tus preferencias, ya sea la ubicación, el precio, el tipo de habitación o las comodidades. Ajusta el resto de tu presupuesto en función de estas prioridades.
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Transporte sin dejar de ser turista
Existen dos formas de ahorrar en transporte durante tus viajes. En primer lugar, para el transporte principal que te llevará a tu destino, es recomendable revisar ofertas con regularidad, tener en cuenta las temporadas alta y baja, y realizar reservas con anticipación. En cuanto al transporte local una vez en el destino, a menudo optamos por tomar taxis de forma regular por temor a lo desconocido, lo cual puede aumentar considerablemente nuestro presupuesto sin que nos demos cuenta. Por ello, te recomendamos utilizar opciones como el metro, autobuses e incluso alquilar bicicletas, lo que puede ayudarte a economizar.
Comer siempre en restaurantes y no explorar opciones locales
Una de las partes más interesantes de viajar es descubrir la gastronomía de los sitios que visitamos. Si bien consideramos que es una de las mejores formas de emplear nuestro dinero, si deseas ahorrar en esta área, lo mejor es no realizar todas tus comidas en restaurantes. En caso de optar por ellos, elige aquellos ubicados fuera de las zonas turísticas y que ofrezcan opciones como menús del día. Además, para reducir los gastos en alimentos preparados, considera la opción de cocinar algunas de tus propias comidas en tu alojamiento.
Únicamente hacer actividades para turistas
Al visitar un lugar, hay ciertos sitios emblemáticos que son imperdibles; por ejemplo, no se puede ir a París y no conocer la Torre Eiffel. Sin embargo, además de estos puntos turísticos principales, también vale la pena aventurarse a las periferias y descubrir otros lugares menos conocidos. Esto no solo ampliará tu visión del destino elegido, sino que también reducirá tus gastos, ya que en los sitios más turísticos los precios suelen ser más altos.
Extra: No verificar tus gastos después del viaje
Al finalizar tu viaje, te recomendamos hacer un recuento de tus gastos totales. Esto te ayudará a verificar en qué áreas estás gastando más y qué cambios puedes hacer para tu próximo viaje. De esta forma, descubrirás tus puntos débiles y fuertes al momento de presupuestar, lo que te permitirá mejorar tus habilidades de planificación financiera para futuros viajes.