Las profundidades del planeta guardan escenarios que sorprenden a todos aquellos que dejan atrás el miedo y se aventuran a conocerlos, el mejor ejemplo es esta increíble mina de sal ubicada en Polonia, en donde puedes descender más de 300 metros por sus caminos y disfrutar de sus más de 3.5 kilómetros de recorrido abierto al público, dividido entre galerías y cámaras. 

Esta increíble mina comenzó su historia en el siglo XIII y se ha mantenido abierta al turismo desde el siglo XV, y fue declarada como Patrimonio de la Humanidad en 1978, por lo que es una experiencia única ose descender por sus cámaras y darse cuenta de la importancia histórica y arquitectónica que ha tenido para Polonia, sin embargo, el atractivo principal fue excavado por los mineros. 

Catedral de la Sal en La Minas de Wieliczka, la iglesia enterrada más grande del mundo

Este increíble monumento de fe fue realizado por los mineros empleados bajo esta tierra para extraer la sal del terreno, a los 100 metros de profundidad comenzaron, no a construir, sino a excavar la increíble catedral en la búsqueda de protección divina que los acompañara en sus actividades diarias a cientos de metros bajo tierra, y lograron una verdadera obra de arte en las profundidades. 

En el interior de esta Catedral existen 4 cámaras finamente diseñadas, con acabados propios de una belleza que resalta gracias a las esculturas y estatuas que custodian en su interior; cuenta con escaleras dignas de palacios luz en candelabros enormes y lujosos, además de los ornamentos que tienen las iglesias tradicionales, por su eso fuera poco, ha sido sede de diversos conciertos musicales, gracias a la increíble acústica. Te dejamos un video como ejemplo de la cuenta de instagram de @crónicasdeuntercioviejo.

Este destino bajo tierra está considerado como la catedral enterrada más grande del mundo y se mantuvo activa hasta hace, relativamente poco, el año de 1996 fue el último en que las entrañas de este destino producían material para la superficie, mismo que sirvió para fijar los cimientos, tallar los muros y los increíbles muebles erigidos cuentos de metros bajo tierra. Sin duda un destino enigmático que debes visitar al menos una vez en tu vida cuando viajes al centro de Europa y en especial a Polonia.