En el sureste de Chiapas se encuentra un paraje que combina serenidad y belleza natural. Es Tzimol, una pequeña localidad rodeada de paisajes que parecen obra de un artista. Sus corrientes de agua con tonalidades azuladas y sus piscinas naturales invitan a relajarse y olvidarse de la rutina, en un ambiente que mantiene intacto su carácter campestre.
Visitar este lugar es sinónimo de paz. El murmullo del río se une al trinar de las aves y al suave viento que recorre su exuberante vegetación. Entre sus opciones de alojamiento sobresale Canto del Agua Ecolodge, un hospedaje frente al río San Vicente que cuenta con cabañas de estilo rústico y actividades que acercan al visitante a la vida silvestre.
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Lejos de la saturación de otros destinos, Tzimol ofrece un entorno ideal para reconectarse con uno mismo. Pasear por las orillas, sumergirse en sus aguas frescas y contemplar el paisaje desde sus miradores crea recuerdos que perduran. Aquí, la naturaleza no es un telón de fondo, sino el centro de toda la experiencia.
No solo es un sitio para descansar, también es un punto de encuentro para quienes buscan acción. Entre cascadas, rutas de senderismo y actividades como rappel, paseos a caballo o acampadas, se puede disfrutar de un turismo lleno de energía en un escenario que parece detenido en el tiempo.
Un paraíso turquesa en plena selva chiapaneca
En el área destaca el paraje conocido como Las Tres Tzimoleras, un conjunto de saltos de agua y charcas naturales donde el líquido adquiere un tono azul profundo por la acción de los minerales presentes en las piedras. Es un sitio perfecto para nadar, recorrer pequeñas cavernas y relajarse con el ambiente tranquilo que lo rodea.
Sin embargo, el lugar que más sorprende a quienes llegan es El Chiflón, un asombroso sistema de caídas de agua en varios niveles que alcanza hasta 120 metros de altura. El camino para llegar ofrece senderos flanqueados por vegetación abundante, puntos panorámicos y espacios diseñados para descansar mientras se contempla la imponente fuerza del agua.
Canto del Agua Ecolodge, descanso frente al río
A escasa distancia del centro recreativo La Rejoya, se encuentra un hospedaje ecológico que dispone de cabañas orientadas hacia el río San Vicente. El sonido ininterrumpido de la corriente genera un entorno de paz, perfecto para relajarse y olvidarse de la rutina. Además, el sitio ofrece servicios como spa, temazcal y un restaurante especializado en recetas típicas de la región.
Incluso quienes no se alojen pueden optar por un pase diario, que brinda acceso durante toda la jornada a sus áreas naturales y a la alberca. Es una alternativa ideal para quienes buscan disfrutar de un día completo de frescura y descanso.
Cómo llegar y qué esperar
Partiendo desde Tuxtla Gutiérrez, capital del estado, el viaje por carretera toma alrededor de tres horas. Es posible llegar en vehículo propio, contratar un servicio de taxi o utilizar transporte público compartido. Al arribar a Tzimol, los viajeros encuentran un entorno tranquilo, con alternativas de hospedaje y gastronomía que se ajustan a distintos bolsillos.
En este destino, lo ideal es llevar zapatos resistentes, ropa para nadar, protector solar ecológico y una cámara para registrar cada detalle. Los paisajes más impresionantes se aprecian en las pozas de agua color turquesa, especialmente al amanecer o cuando los rayos del sol iluminan por completo la superficie.
Datos clave para tu visita a Tzimol
- ¿Dónde está ubicado?
En Tzimol, Chiapas, a 3 horas de Tuxtla Gutiérrez.
- ¿Qué actividades se pueden hacer?
Nado en pozas, rappel, senderismo, cabalgatas, campismo y visita a cascadas.
- ¿Cuál es el atractivo principal?
Las cascadas El Chiflón y Las Tres Tzimoleras.
- ¿Hay hospedaje?
Sí, el Canto del Agua Ecolodge ofrece cabañas y servicio de restaurante.
- ¿Se puede ir por el día?
Sí, con un day pass que da acceso a instalaciones y áreas naturales.