Pueblos Mágicos de México es un programa que incluye los sitios más representativos y pintorescos del país, hermosos lugares que cuentan con importantes tradiciones y espacios monumentales, así como una exquisita gastronomía y festividades que se han conservado a lo largo de los años, pues los pobladores de cada uno de estos lugares han resguardado todos estos elementos para ofrecerte una experiencia auténtica en cada uno de ellos.
Como viajeros, siempre estamos en busca de diferentes formas de conocer los diversos parajes que ofrece nuestro país, además de algunas actividades que nos permitan crear los mejores recuerdos y hacer de cada recorrido, un momento especial. Es por eso que a continuación vamos a conocer algunos de los pueblos mágicos más cerca de la capital, que podrás recorrer en bicicleta, para visitar en un día o fin de semana.
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1. Pátzcuaro, Michoacán
El pueblo mágico de Pátzcuaro se localiza a tan sólo cinco horas, en viaje por carretera, de la Ciudad de México, un sitio idóneo para hacer un largo paseo en bicicleta, pues sus calles están adornadas por diferentes matices que deslumbrarán tus sentidos, mientras haces ejercicio y disfrutas del contacto con cada uno de sus puntos más sobresalientes, haciendo de estos momentos, algo inolvidable.
En sus alrededores podrás encontrar casonas sorprendentes, construidas en la época colonial, fuentes, jardines y cada domingo, podrás encontrar exposiciones de obras de diferentes artistas de la localidad que se exhiben para su venta. Puedes iniciar tu recorrido en la Plaza Vasco de Quiroga o en la Plaza Grande y seguir tu trayecto por la Casa de los Once Patios, construida en 1742 y los demás sitios relevantes.
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2. Huamantla, Tlaxcala
El pueblo mágico de Huamantla, entró en el listado de Pueblos Mágicos de México en el año 2007, otro de los puntos más cercanos a la capital del país, en donde puedes pasar una tarde muy amena, recorriendo sus calles en tu bicicleta. La Hacienda Soltepec puede ser el punto de inicio de este recorrido, en el que podrás visitar la Iglesia de San Martín Obispo, el Parque Nacional la Malinche, la Hacienda de San Pedro y el Museo Nacional del Títere.
Recorrer las bellas calles de Huamantla, es una actividad muy reconfortante, pues sus paisajes clásicos te envuelven en un ambiente de tranquilidad o clama y al finalizar el recorrido, tendrás que reponer energías, para lo cual es recomendable, probar algún platillo típico de esta zona, como las Santas rellenas, los huevos de rancho y los panuchos, una excelente opción para saciar tu apetito y reponer un poco de la energía que desgastaste al hacer el recorrido.
3. Real del Monte, Hidalgo
El pueblo de Real del Monte es uno de los puntos más destacados del estado de Hidalgo, un bello lugar muy pintoresco y agradable, que cuenta la historia minera que envuelve su pasado. Esta ciudad montañosa es uno de los puntos que ofrece las vistas más espectaculares, un recorrido imperdible para los amantes de las bicicletas y de los sitios naturales por excelencia, pero debes tener en cuenta que tu condición física debe ser óptima, pues conocer este pueblo en bicicleta, es todo un reto que debes superar.
Los puntos principales que puedes visitar en este viaje es el Museo del Sitio Mina de Acosta, un espacio dedicado a la historia de la minería, que te ayuda a conocer más de la historia en este lugar, junto con el Centro de Interpretación Mina La Dificultad. Otra de las paradas imperdibles de Real del Monte es su famoso Panteón Inglés, que cuenta con impresionantes obras de arte que fungen como monumentos funerarios, donde se encuentran los restos del “payaso” de Porfirio Díaz, Richard Bell.